La obra del historiador israelí Yuval Noah Harari – Homo Deus: Breve historia del mañana​ y 21 lecciones para el siglo XXI- examina lo que podría acabar sucediendo cuando los mitos de la antigüedad entren en contacto con nuevas tecnologías de ilimitadas posibilidades, como la inteligencia artificial y la ingeniería genética.

Sapiens: Una breve historia de la humanidad describió cómo los seres humanos conquistaron el mundo gracias a su capacidad única para creer en mitos colectivos sobre dioses, dinero, igualdad y libertad. Homo Deus: Una Breve Historia del Mañana examina lo que le podría suceder al mundo cuando en un futuro estos antiguos mitos se unan con nuevas tecnologías divinas como son la inteligencia artificial o la ingeniería genética.

¿Qué pasará con la democracia cuando Google y Facebook lleguen a conocer nuestros gustos y preferencias políticas mejor que nosotros mismos? ¿Qué pasará con el estado de bienestar cuando las computadoras empujen a los humanos fuera del mercado de trabajo y creen una nueva y enorme «clase innecesaria»? ¿Cómo podrá lidiar el Islam con los avances en ingeniería genética? ¿Terminará Silicon Valley por producir nuevas religiones en lugar de solo nuevos gadgets?

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A medida que el Homo sapiens se convierta en Homo deus, ¿qué nuevos destinos nos marcaremos como metas? Erigidos como dioses por nosotros mismos, ¿qué proyectos deberemos emprender y cómo protegeremos de nuestros propios poderes destructivos tanto a este frágil planeta como a la humanidad misma? El libro Homo Deus nos da una visión de los sueños y pesadillas que marcarán el siglo XXI.

Sapiens explicó cómo la humanidad llegó a dominar el planeta. Homo Deus examina nuestro futuro. Combina la ciencia, la historia, la filosofía y todas aquellas disciplinas que las interrelacionan ofreciendo una visión del mañana que al principio puede parecer incomprensible pero que después se presenta como innegable: la humanidad perderá pronto no sólo su dominio sino su propio significado. Tampoco deberíamos resistirnos: mientras nuestro motivo favorito en la ciencia ficción imagina a los humanos luchando contra las máquinas en nombre de la libertad y el individualismo, en realidad estos mitos humanistas han sido descartados desde hace tiempo, tan obsoletos como las cintas de casete o las danzas de lluvia. Esto puede sonar alarmante, pero el cambio siempre es aterrador.

Durante el siglo pasado la humanidad ha logrado hacer posible lo imposible, frenando el hambre, la peste y la guerra. Hoy en día, más personas mueren de obesidad que por hambrunas; más personas mueren a causa de la vejez que por las enfermedades infecciosas; y más personas se quitan la vida de las que mueren a causa de un conflicto bélico. Somos la única especie en la larga historia de la Tierra que ha sido capaz de cambiar el planeta entero, y ya no esperamos que ningún ser superior moldee nuestros destinos.

El éxito genera ambición, así que la humanidad buscará ahora la inmortalidad, la felicidad ilimitada y los poderes divinos de la creación. Pero la búsqueda de estos mismos objetivos acabará por hacer superfluos a la mayoría de los seres humanos. ¿Hacia dónde nos encaminamos? Hoy en día podemos hacer elecciones con los ojos bien abiertos, conscientes de hacia dónde nos están guiando. No podemos detener la marcha de la historia, pero podemos influir en su dirección.

Las predicciones típicas del futuro imaginan que el día de mañana, en el fondo, se parecerá mucho al día de hoy: poseeremos nuevas y asombrosas tecnologías, pero mantendremos viejos valores humanistas como la libertad y la igualdad, que aún nos guiarán. Homo Deus, sin embargo, desmantela estos supuestos y abre nuestros ojos a una amplia gama de posibilidades alternativas, con argumentos provocativos en cada página:

Después de cuatro mil millones de años de vida orgánica, la era de la vida inorgánica está comenzando.

Los principales productos de la economía del siglo XXI no serán los textiles, los vehículos y las armas, sino los cuerpos, los cerebros y las mentes.

Mientras que la Revolución Industrial creó a la clase obrera, la próxima gran revolución creará la “clase innecesaria”.

La forma en que los seres humanos han tratado a los animales es un buen indicador de cómo los seres humanos mejorados tratarán al resto.

El islamismo radical supone un reto imponiendo su resistencia, pero las religiones verdaderamente impactantes saldrán de Silicon Valley, no de Oriente Medio.

La democracia y el mercado libre se derrumbarán una vez que Google y Facebook nos conozcan mejor de lo que nos conocemos nosotros mismos. La autoridad cambiará de manos: pasará de estar bajo el control de los individuos para ser propiedad de los algoritmos de la red.

Renunciaremos conscientemente a la privacidad en la búsqueda de una mejor salud.

 Los humanos no lucharán contra las máquinas, se fusionarán con ellas. Nos dirigimos hacia el matrimonio más que a la guerra.

La mayoría de nosotros no llegará a decidir cómo la tecnología afectará a nuestras vidas porque la mayoría de nosotros no entiende esta tecnología. ¿Cuántos de nosotros, de hecho, votaron sobre cómo funcionaría Internet?

Esta será la forma que tendrá el nuevo mundo, donde la brecha entre los que se incorporan y los que quedan será mayor que la brecha entre los imperios industriales y las tribus agrarias, más grande incluso que la brecha entre el Sapiens y los Neandertales. Esta es la siguiente etapa de la evolución. Este es el Homo deus.

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