En enero de 2016, Luis Ángel Bravo Contreras dio la orden de que 13 cuerpos hallados en un barranco cerca de la Academia de Policía de “El Lencero” y que ya se encontraban bajo resguardo de Servicios Periciales, ahora fueran entregados a miembros de la Fuerza Civil para su desaparición.

Esta fue la instrucción dada por quien fuera ex fiscal general del Estado en la era duartista, por la cual hoy en día ya pesa sobre él una orden de aprehensión y el Gobierno de Veracruz ofrece una recompensa de 5 millones de pesos.

El gobernador Miguel Ángel Yunes Linares informó que el pasado viernes 11 de mayo de año en curso, la Fiscalía General del Estado obtuvo orden de aprehensión en contra del ex Fiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras por su probable intervención en la comisión del delito de desaparición forzada de personas, en la modalidad de entorpecer la investigación y apoyar a que los responsables de su comisión se eludieran de la acción de la justicia.

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Aseguró que la Fiscalía General cuenta con datos de pruebas contundentes que acreditan que Luis Ángel Bravo Contreras ordenó a personal bajo su mando ocultar y alterar del hallazgo de 13 cuerpos, mismos que fueran localizados en el lugar conocido como La Barranca de La Aurora, en el municipio de Emiliano Zapata, Veracruz y que es señalado por testigos como el lugar en que arrojaban a víctimas de desaparición forzada, presuntamente cometida por servidores públicos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

El día 19 de enero de 2016, en aquél lugar, fueron localizados restos de al menos 19 personas, sin embargo, dio la instrucción de únicamente reportar el hallazgo de 6 cuerpos.

De los 13 cuerpos que ocultaron, uno de ellos fue llevado hasta la localidad de Santa Ana, municipio de Alto Lucero, donde se simuló haberlo encontrado. Dicho cuerpo, al momento de haber sido simulado su hallazgo en la localidad de Santa Ana, ya había sido identificado positivamente como quien en vida llevara el nombre de David Lara Cruz, elemento de la Secretaría de Seguridad Pública, quien despareció el día 12 de enero del 2016, después de haber sido privado de su libertad por miembros de su propia corporación, cuando salía de las instalaciones de Evaluación y Control de Confianza de esa Dependencia.

Sobre los restos de las 12 personas restantes, mismos que no fueron reportados oficialmente, se desconoce su identidad y ubicación, pues según testimonios, dichos restos fueron entregados a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, Dependencia que se encontraba al mando del vinculado a proceso por su probable participación en desapariciones forzadas, Arturo Bermúdez Zurita, durante el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, por instrucciones directas de Luis Ángel Bravo Contreras.

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