En el Congreso de Veracruz se busca aprobar la Ley que prohíbe el castigo corporal en contra de menores, mejor conocida como Ley que prohíbe el “chanclazo” como una medida correctiva.

Al respecto, la diputada local de MORENA, Cristina Alarcón Gutiérrez, dijo que su propuesta de Ley contra las correcciones violentas a menores es más amplia que la que se aprobó a nivel federal.

La Iniciativa con proyecto de Decreto reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; del Código Civil, y de la Ley de Asistencia y Prevención de la Violencia Familiar, en materia de prohibición de correcciones disciplinarias violentas a niñas.

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Dentro de la propuesta se determina que la Procuraduría Estatal de Protección, podrá intervenir, conforme al interés superior de niñez, en un caso de violencia y solicitar al Ministerio Público competente la imposición de medidas urgentes de protección especial idóneas, cuando exista un riesgo inminente contra la vida, integridad o libertad de niñas, niños y adolescentes

También se obliga a que cada ayuntamiento cuente, dentro de la estructura del Sistema DIF Municipal, con una Procuraduría Municipal de Protección.

“Esto (la violencia) atenta contra la dignidad humana y la integridad física, así como emocional (…), pero también se abarcará cualquier otra forma de violencia, como la verbal, la emocional o la económica y que además prevea no sólo el castigo como tal, también los actos de reprimendas, correcciones, disciplinas, regaños, que se hagan de forma violenta, cruel y degradante causando a la niñez dolor, zozobra, denigración o humillación que atenten contra su integridad”, detalló.

De esta manera, afirmó que se busca englobar todas estas formas conocidas como “correcciones disciplinarias violentas” para prohibirlas.

“Cabe señalar que también consideramos necesario actualizar el concepto de violencia para incluir dentro de esta a las correcciones disciplinarias violentas; la iniciativa prevé que la educación debe ir encaminada a promover cuidados bajo el concepto de la crianza propositivo, lo que respeta su dignidad como persona y obliga al Estado a promover, formar o incentivar este tipo de educación.

“Será difícil imponer una cultura de paz mientras se permita educar a los niños por medio de la violencia”, opinó.

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