Así como el presidente de la república, Enrique Peña Nieto ordenó que la Procuraduría General de la República (PGR) presentará ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la acción de inconstitucionalidad en contra del Congreso y del gobernador de Veracruz y Quintana Roo, para evitar los mantos de impunidad que preparaban Javier Duarte y Roberto Borge, también se actuó contra Chihuahua.
En aquella entidad se emitió la reforma para la creación de la Fiscalía Especializada Anticorrupción, sin esperar la publicación de las leyes generales que establecen el Sistema Nacional Anticorrupción.
Una vez terminado el análisis de las reformas realizadas por el Congreso chihuahuense, la PGR detectó que estas contienen vicios legales, los cuales no son acordes al sentido y el fin de la reforma constitucional del 27 de mayo de 2015.
Con esta acción, se impugna la creación de la Fiscalía Especializada Anticorrupción y eventual nombramiento de su titular.
Peña Nieto va como el águila de nuestro lábaro patrio, devorando la serpiente.