Comienza la semana en la capital del estado de Veracruz, trabajadores y estudiantes se despiertan desde muy temprano para arreglarse y dirigirse a sus respectivos destinos, sin embargo para una entidad donde el Gobierno del estado le debe a todos, la sociedad debe despertar para manifestarse y exigir sus pagos que les corresponden.
Nuevamente Xalapa despertó esta semana con calles bloqueadas, empleados cansados del hartazgo y promesas no cumplidas por parte del Gobierno de Javier Duarte.
Los más molestos son aquellos que sin deberla ni temerla, no pueden llegar temprano a sus ocupaciones, y que ya están hartos de los cierres de aquellos que sabiendo la situación por la que miles de veracruzanos están pasando al no tener sus pagos, deben salir a la calle a exigirlos, y que no lo harían, si tuvieran cada mes o cada quincena sus remuneraciones laborales.
Xalapa ya está cansada de ver a tantos desesperados, sin embargo, seguirá solidaria con los afectados y no dejará de permanecer cerrada hasta que los funcionarios estatales dejen la irresponsabilidad y el importamadrismo con lo que se han conducido estos años.
