El presidente Donald Trump, que ayer volvió a apuntar contra los demócratas calificándolos como una “desgracia”, escapó del frío de Washington DC y de su juicio político para celebrar la Navidad y el Año Nuevo en la soleada Florida junto a familiares y amigos.
De acuerdo a fuentes cercanas al mandatario, una cosa que no está celebrando es la demora en su juicio político en el Senado.
Eso lo tiene “loco como el infierno”, de acuerdo a un aliado, citado ayer por la cadena ABC News.
El Senado aplazó el inicio del juicio hasta enero ante la imposibilidad de acordar con el líder de la mayoría del Senado Mitch McConnell y el líder demócrata Chuck Schumer el procedimiento del juicio. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo que quiere saber cómo se manejará el juicio antes de enviar al Senado los dos artículos del “impeachment” aprobados esta semana por la Cámara contra Trump.
Trump, quien voló a su resort privado de Palm Beach el viernes por la noche, ha estado esperando un juicio en el Senado controlado por los republicanos y se mostró molesto por el retraso, según el senador Lindsey Graham.
“Está loco como el infierno porque le harían esto y ahora le negarían su día en la corte”, expresó Graham en una entrevista, luego de reunirse con Trump en la Casa Blanca el jueves por la noche.
Posiblemente Trump exprese su frustración esta noche durante un discurso que tiene programado para un grupo de activistas estudiantiles conservadores que asistan a la conferencia Turning Point USA en West Palm Beach, Florida.
En realidad el presidente ya comenzó a manifestar su enojo esta mañana en su cuenta de Twitter. “La gran desgracia demócrata. Pero estamos ganando!”, escribió el mandatario, citando un mensaje en la red del senador republicano Rand Paul, que también atacaba la actitud de los demócratas en su intento por llevar a Trump a juicio político.
“Hemos visto audiencias falsas, testigos seleccionados y demócratas que han contorsionado los hechos para que se ajusten a una narrativa ficticia”, tuiteó el senador republicano.
“Vergonzoso que desde el primer día de esta presidencia debidamente elegida, los demócratas hayan querido destituir a @POTUS”, añadió.
“Innecesario y contraproducente”, agregó el senador. “El senado pondrá fin a esta farsa!”, se entusiasmó.
Trump se convirtió esta semana en el tercer presidente estadounidense en ser sometido a un juicio político, tras lo cual afirmó que quiere que su país inicie el juicio político en su contra de inmediato.
“Quiero un proceso inmediato” en el Senado, señaló el republicano. “Entonces, después de que los demócratas no me dieron el debido proceso en la Cámara, ni abogados, ni testigos, ni nada, ahora quieren decirle al Senado cómo llevar a cabo su juicio”, completó.
