El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador reclamó a las empresas que ofrecen telefonía e internet, por no brindar servicio en el 80 por ciento del territorio nacional, ya que “no es negocio” pese a que cuentan con concesiones del Estado.

 Desde el Nayar, en Nayarit, donde anunció que este año culminarán las obras de las carreteras interestatales Ruz-Zacatecas y Tepic-Durango, que gobiernos anteriores dejaron inconclusas, el primer mandatario indicó que el Gobierno Federal habilitará su propia compañía de internet.

 “Con respeto”, se les dirá a las telefónicas “háganse a un lado” a las concesionarias que no han comunicado al país, advirtió.

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“¿Qué les vamos a decir, con mucho respeto a las empresas que han tenido las concesiones y que no han comunicado al país?

 ¡Háganse a un lado, porque ahora el gobierno va a tener su empresa para comunicar con internet a todos los mexicanos! Ese es el compromiso”, remarcó.

 El Jefe del Ejecutivo federal se quejó de que la señal sea débil o de plano no exista en comunidades indígenas o alejadas de los principales centros urbanos. “Ni subiéndose a los cerros” hay internet, lamentó.

 “Ni subiéndose a los cerros encuentra uno la señal, porque buscan nada más el negocio. Saben cuánto está comunicado con internet el país, cuánto del país está comunicado por internet, solo el 20 por ciento del territorio nacional, 80 por ciento no hay internet”, enfatizó.

Ante habitantes del Nayar, también prometió cumplir todos los compromisos hechos con las comunidades indígenas. No se les quedará a deber, el gobierno “se pondrá al corriente”, expresó. Asimismo, comprometió que todos los pueblos de Nayarit que aún no tienen luz serán electrificados.

Sin poner fecha al ofrecimiento, dijo que paradójico que, teniendo tres presas hidroeléctricas generadoras de energía, no todos los nayaritas tengan electricidad en sus hogares y comunidades.

 Convocó a los pueblos originarios de la entidad a reunirse para llega a un acuerdo sobre cómo se distribuirán los programas y el apoyo del Gobierno Federal, como la pensión para adultos mayores.

En el marco de los reclamos en distintos puntos del país, por la tardanza en la entrega de las pensiones referidas, hizo una consulta exprés entre las personas presentes en el Centro Ceremonial de la comunidad de Jesús María, en el Nayar.

 Pidió a los adultos mayores de 65 años, levantar la mano, para indicar si habían recibido o no la pensión del Gobierno Federal.

 “A eso vengo, así no me engañan, me doy cuenta de cómo están las cosas”, recalcó, tras aseverar que por ello, no viaja en helicópteros sino a ras de tierra, de otro modo, no se percataría de las condiciones reales en que viven los mexicanos. Y es que no le gusta, remarcó, ser rodeado por “lambiscones, por barberos”.

 Aseveró que las mañas de autoridades locales, de entregar apoyos solo cuando el Presidente visitará las comunidades, se acabarán, aunque no es fácil terminar con ese tipo de costumbres.

Recalcó que el gobierno ya no tiene una oficina de espionaje como lo fue el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), porque al Presidente, el pueblo le informa.

Al utilizar nuevamente frases de tipo religioso y recordar como lo hace en todos sus discursos, que, en su época, el “apóstol de la democracia”, Francisco I. Madero enfrentó al dictador Porfirio Díaz y usó la frase bíblica de que “el pueblo tiene hambre de sed y justicia”, el primer mandatario calificó su administración como “una bendición”. “Como bendición inició este cambio, se va a saciar la sed de hambre y justicia”, dijo.

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