Es uno de los municipios más visitados por gente de cine y televisión en Veracruz. Los xiqueños presumen que allí se han filmado alrededor de quince películas de todos los calibres: filmes para la industria de Hollywood, Telemundo y cintas sudamericanas, francesas y desde luego mexicanas.

El norteamericano Michael Douglas protagonizó en esos agrestes terrenos la cinta Dos bribones tras la esmeralda perdida; el aventurero Harrison Ford realizó trepidantes acciones en la película Peligro inminente, y haciéndola de moderno cura en la famosa iglesia local, el mexicano Gael García junto a la bella Ana Claudia Talancón actuó en El crimen del padre Amaro. En fechas recientes, se filmaron escenas para la sexta temporada de El Señor de los Cielos y su capo Aurelio Casillas, protagonizado por Rafael Amaya.

Xico es un pequeño y pintoresco municipio serrano de 15 mil habitantes, situado en las faldas del Cofre de Perote y al que se puede llegar rápidamente por la moderna carretera a Coatepec -el Pueblo Mágico vecino-, por encontrarse a tan sólo 20 kilómetros de Xalapa.

Fundado por españoles en el siglo XVI, el mestizaje local es resultado de que en el sitio vivieron indígenas de origen totonaca y náhuatl. El nombre del municipio proviene del náhuatl Xicotl o Xicochimalco, que significa “Nido de Jicotes” (abejas). El escudo municipal presenta una serie de panales de cera amarilla, en alusión a la flora y la miel extraída de las flores de cafetos y naranjos de la zona. La historia señala que por esos parajes caminó hacia la gran Tenochtitlan el conquistador Hernán Cortés en 1519.

Foto Jarocha Luis Ayala

Es un territorio cubierto de vegetación de clima templado y húmedo, donde existen haciendas cafetaleras, granjas de trucha en Xico Viejo y lugares icónicos como el Cerro de San marcos (que semeja una gran pirámide inconclusa cubierta de vegetación) y la célebre Cascada de Texolo -también llamada Cascada de La Monja- con una altura de 78 metros a decir de los lugareños, ubicada en los límites con el municipio de Teocelo y a tres kilómetros del centro histórico de Xico.

Con categoría de ciudad desde 1955 y Pueblo Mágico desde el año 2011, la población muestra un gran conjunto de casas coloniales de teja y calles adoquinadas y empedradas alrededor de la Plaza de los Portales, en un colorido paisaje urbano que mantiene el encanto tradicional de la provincia.

El 19 de julio se celebra la feria titular en honor de Santa María Magdalena, patrona de la parroquia principal, construida con una arquitectura barroca y neoclásica. En esos días de fiesta religiosa se lleva a cabo La Traída de la flor, La alfombra y La Xiqueñada. Los xiqueños acarrean desde los montes y viveros la flor para adornar y vestir la festividad. Construyen un enorme arco de 15 metros de altura y 4 metros de ancho con flores de Izote y otras variedades, que colocan a la entrada del templo. Con aserrín pintado de colores hacen diferentes figuras sobre la calle Hidalgo, como homenaje al recorrido que hace la Virgen por esa vialidad hasta la parroquia. La Xiqueñada le lleva a cabo el día en que sueltan sobre esa calle algunos toros bravos para que el público los toree al estilo de La Pamplonada española. Junto al templo se encuentra el Museo de la Parroquia, donde se presentan 700 vestidos que la población ha ofrendado en diferentes épocas a Santa María Magdalena. Por las noches de ese mes se queman fuegos pirotécnicos enfrente de la iglesia.

Decenas de turistas viistan el pueblo mágico de Xico, quienes acuden a la región en las festividades de la Virgen de la Magadalena. El mirador de la cascada de Texolo y de la Monja son sitiios favoritos por los paseantes. Fotojarocha.com Saúl Ramírez

A lo largo de la calle Hidalgo y el acceso a la Cascada existen numerosos restaurantes y algunos lugares de hospedaje. La gastronomía cuenta entre sus tesoros el famoso e internacional Mole de Xico, los chiles rellenos, el Xonequi, que es un caldo de frijoles guisado con hojas de Chonequi y bolitas de masa sazonadas con manteca; otro guiso local es el picante chileatole. Para alegrarse la comida pueden degustarse los licores típicos Morita o Verde o Maracuyá de Xico. Y si de postre se trata, ofrecen el oloroso café de la región, acompañado con pan de huevo horneado a la leña o las tradicionales galletas.

Xico cuenta con una gran riqueza cultural, gastronómica y artística que motiva a visitar el municipio. El turismo ecológico y de aventura tiene muchas opciones durante todo el año: caminatas por el campo, fotografía paisajística, degustación de café y licores típicos, museos, templos, ciclismo de montaña, senderismo y montañismo. Máscaras y artesanía en madera de café, se ofrecen por doquier. Se pueden visitar las instalaciones de la Planta Hidroeléctrica en el Río Texolo, donde también hay un restaurante y el concurrido beneficio de café Abamoxol.

El río Texolo es tributario del río de Los Pescados o La Antigua, que cuenca abajo llega a Jalcomulco. En la barranca de Matlacobatl por donde discurre el río, se pueden practicar rapel, tirolesa y rafting.

Para quedarse, existen algunos hoteles en Xico, pero se tiene una mayor disponibilidad en Coatepec y Xalapa.

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