Por tercer día consecutivo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, agradeció a México sus acciones para frenar la caravana de migrantes hondureños.
En un acto de campaña rumbo a las elecciones legislativas del 6 de noviembre, el mandatario valoró que el gobierno mexicano tomara medidas para impedir el avance de los centroamericanos.
“Quiero agradecer a México. México ha sido increíble”, expresó un día después de que policía y personal migratorio de dicho país se apostó en su frontera con Guatemala para atender la situación.
Lo mismo había hecho el jueves, en vísperas del arribo de los migrantes, y el viernes, cuando los hondureños llegaron al fronterizo río Suchiate.
Durante el mitin en Elko, Nevada, Trump volvió a acusar al Partido Demócrata de impulsar la caravana migrante, aunque sin ofrecer pruebas de ello. Los líderes de ese partido “quieren la caravana, les gusta la caravana”, señaló.
Aseguró que la plataforma demócrata ahora impulsa “el socialismo radical y las fronteras abiertas”, y en varias ocasiones mencionó que la intención de ese partido es convertir a Estados Unidos en Venezuela.
Trump añadió que los líderes demócratas “invitan a millones de migrantes ilegales para que violen nuestras fronteras”.
En opinión del presidente estadunidense, “México ahora nos trata diferente, con respeto”, y ello proviene de la relación desarrollada durante las negociaciones para el nuevo acuerdo comercial entre ambos países y Canadá.
“Ahora México respeta el liderazgo de Estados Unidos”, argumentó Trump al asegurar que otras naciones también respetan a su país, de acuerdo con lo que le habrían expresado líderes mundiales en Naciones Unidas en septiembre pasado.
Las declaraciones de Trump se dieron luego que unos tres mil migrantes centroamericanos, en su mayoría provenientes de Honduras, llegaron el viernes a territorio mexicano, donde son evaluadas sus solicitudes de refugio.