Pese a la primera reestructuración de la deuda pública a largo plazo en Veracruz, la Auditoría Superior de la Federación (ASF), señaló que la entidad comprometió sus participaciones Federales poniéndolas como la principal garantía y fuente de pago de dichas obligaciones.

Por ello en el Informe General de la Tercera Entrega de Informes Individuales de la Fiscalización Superior, la entidad fue ubicada como uno de los estados con riesgo de afectar la sostenibilidad de sus finanzas públicas en el largo plazo.

Esto como consecuencia del monto elevado de su deuda pública y la mayor dinámica de crecimiento del saldo de sus obligaciones financieras, pese a que en dicho ejercicio el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares ya había concretado una reestructuración de los créditos a largo plazo que heredó.

Según el registro de las Obligaciones Financieras en el último año del bienio anterior la deuda sólo se redujo de 49 mil millones de pesos registrados en 2018 a 47 mil 232.6 millones de pesos.

Veracruz se situó dentro de los 7 estados que concentraron el 61.8 por ciento del saldo total de la deuda pública en 2017, junto con la Ciudad de México, Nuevo León, Chihuahua, Estado de México, Coahuila y Sonora.

De los 47 mil 232.6 millones de pesos de deuda veracruzana a largo plazo, al mes de diciembre de 2018 el 13.3 por ciento se destinó a insuficiencias de liquidez de carácter temporal y el 86.7 por ciento a inversión pública productiva.

La ASF añade que al cierre del ejercicio, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Quintana Roo, Sonora, Veracruz, Ciudad de México y Zacatecas tenían comprometidos sus recursos federales por valores superiores que el 100 por ciento y hasta el 267.4 por ciento.

En general a nivel nacional las Participaciones Federales siguen constituyendo la principal garantía y fuente de pago de las obligaciones financieras de los estados. En 2018, de los 203 créditos contratados, 87 fueron de corto plazo, que no requieren garantía.

De los 116 créditos restantes, el 66.4 por ciento tuvo como fuente de pago el Fondo General de Participaciones (FGP); 22.4% el Fondo General de Participaciones (FGP) más impuestos sobre nóminas, bonos cupón cero y el Fondo de Fomento Municipal, 6.9 por ciento con fondos del Ramo 33 destinados para este fin de acuerdo con la Ley de Coordinación Fiscal y 4.3 por ciento con ingresos locales.

Según la ASF, en 2018 la deuda pública de las entidades federativas, los municipios y sus entes públicos ascendió a 601 mil 218.3 millones de pesos, con una disminución de 1.7 por ciento real de 20 mil 573.6 millones de pesos en relación con 2017.

Hay que recordar que en 2019, el Gobierno de Cuitláhuac García implementó otra reestructuración de la deuda pública veracruzana a largo plazo, pasando de un saldo de 44 mil 354 millones 500 mil 005 pesos a inicios de ese ejercicio a 42 mil 207 millones 482 mil 622 pesos al concluir el año.

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