12.02.2016
Los tiempos cuando son difíciles no necesariamente se deben advertir catastróficos. Lo mismo se sale de una noticia de corrupción legal cuando se entra en otra ilegal como aquel ignorante que ha desatendido la razón. Lo importante es seguir caminando, viviendo la vida tratando de esquivar todo aquello que hace daño, sin hacer daño.
Las cosas públicas, económicas, sociales de la semana no marcharon bien en el país, mucho menos en Veracruz. Sin embargo, hoy llega el Papa a México, toca un momento de reposo, de anhelo, de fe y de esperanza para muchos mexicanos. El Papa Francisco viene para renovar los ánimos y dejará una estela positiva por algunos días. Resoplarán aires diferentes, la actitud se transformará, aunque sea por algunos días.
Ahora toca pasar un fin de semana tranquilo para no formar parte de esas corrientes de pensamiento dominantes. Merece la pena fingir que no se ha cuestionado nada, ni quien facilitó tal o cual instrumento para romper la paz social. Es momento de hacer de cuenta que no se sabe que existen deudas, corrupción oficial, enriquecimiento ilícito de los políticos, motines.
Hay que simular ignorancia, de dónde llega el dinero que utilizan y van a disponer los políticos en las próximas campañas. Sin embargo, si hay suerte de reunirse con los amigos, si se encuentra con algún vecino y surge alguno de los temas que ponen tonto, diga que ningún político se ha robado nada, que la devaluación del peso frente al dólar “no afecta a los mexicanos”, que no han incinerado a nadie, que no hay fosas con cientos de restos humanos, que todo es producto de un “error”.
Si tiene la oportunidad use un salvavidas espiritual, los jeans arrumbados en el armario, salga a dar un paseo con quien apetezca y a donde quiera. Si este fin de semana llama a casa el “candidato” o algún prominente político, diga que está indispuesto. Los políticos creen, por lo regular, que todos están dispuestos en cualquier momento, no quieren resolver, quieren que les resuelvan. No permita que lo anormal se haga normal.
Es necesario poner atención al escuchar el silencio. La próxima semana llegará y cada quien sabrá como salir del paso. Vendrá el tsunami de cosas que no merece la pena comentar mas.
Vale despreocuparse estos días, son pocos. Deje a los políticos que se encarguen, como la Volkswagen, de inventar un sistema para falsificar los datos de la contaminación. No hagan política, hagan la paz. Es tiempo para el alivio. (AF)