La Fiscalía del Estado de Jalisco reveló este jueves nuevos hallazgos sobre el caso de Luz Raquel Padilla, la mujer mexicana que denunció amenazas de un hombre y que luego fue quemada viva.

Según el peritaje de la Fiscalía, Padilla habría sido la responsable de las pintas que aparecieron afuera de su vivienda y que ella misma denunció en su momento ante las autoridades, aunque estas hicieron caso omiso y no tomaron medidas para evitar el feminicidio.

El Ministerio Público asegura que “no se encontraron similitudes gráficas” entre la escritura estampada y la prueba que analizaron de Sergio Ismael ‘N’, un vecino de Padilla que fue detenido como probable responsable del crimen y quien este jueves obtuvo la libertad condicional.

Te puede interesar: Jesús Murillo Karam es vinculado a proceso por el caso Ayotzinapa y se queda en prisión preventiva

“Al analizar la escritura plasmada en los muros, y la escritura de Luz Raquel, remitida por el agente del Ministerio Público, se encontraron suficientes similitudes gráficas para determinar que corresponden al mismo origen gráfico”, afirmó la perito especialista en grafoscopía, Quetzalli Meza.

Impunidad

El sábado 16 de julio, Padilla, madre de un niño de 11 con epilepsia, caminaba en la vía pública en Zapopan cuando desconocidos le rociaron alcohol y le prendieron fuego. La mujer resultó con quemaduras de segundo y tercer grado en más del 80 % de su cuerpo, y falleció el martes siguiente en el Hospital Civil de Guadalajara.

La brutal agresión causó aún mayor conmoción en el país latinoamericano debido a que Padilla había sido víctima de un ataque con cloro industrial en el tórax, a mediados de mayo. El 17 de ese mes, la mujer denunció que diariamente recibía amenazas de muerte por parte de su vecino, a quien identificó como su “agresor”.

Padilla publicó fotografías de las pintas realizadas afuera de su vivienda, en donde se leían los siguientes mensajes: “Te voy a quemar viva” y “Te vas a morir, Luz”.

Las autoridades del municipio de Zapopan y del estado de Jalisco tenían conocimiento de las denuncias por amenazas recibidas, pero no impidieron el crimen en contra de Padilla.

Publicidad