Cuando pensamos en tener una sonrisa perfecta, consideramos que es suficiente con lavar los dientes tres veces al día; sin embargo, poco reparamos en los alimentos y bebidas que llegan a dañar el esmalte y a mancharlos.
B360, una marca en cuidado de la salud bucal, nos explica los alimentos que manchan tus dientes más que el promedio.
Salsa de tomate
Acompañada de una pasta es deliciosa; sin embargo, esta salsa puede llegar a ser un problema para nuestros dientes debido a su acidez, su tono rojo y su tendencia a pegarse a los dientes.
Para que no dejes de consumirla, recomiendan que unos minutos antes comas verduras verdes como espinaca o brócoli, que crearán una delgada capa protectora sobre los dientes.
Vino
Una vez más nos encontramos ante una delicia que suele manchar nuestros dientes y la razón es que la naturaleza ácida del vino, proveniente de la fermentación del mosto de uva, puede abrir los poros del esmalte dental.
Debido a esto, el fuerte color de las partículas del vino se adhiere a la superficie de las piezas dentales.
Ojo, con el vino blanco no ocurre esto.
Frutos rojos
Blueberries, frambuesas y arándanos son deliciosas, pero contienen pigmentos oscuros que pueden llegar a manchar los dientes y, si tu esmalte es muy poroso, las manchan serán persistentes. Esto aplica también para los jugos de colores oscuros como uva, betabel y granada.
Una forma en que puedes disfrutar de los smoothies de frutos rojos y disminuir los agentes manchadores, es agregando manzanas, peras, pepino o apio a tu licuado. No solo no cambiarán el sabor de tu batido, sino que lo realzarán y actuarán como limpiadores sobre tus dientes.
Refrescos y bebidas deportivas
Además de su gran cantidad de azúcar y edulcorantes dañinos para la salud, los refrescos pueden erosionar el esmalte de tus dientes y cuando estos ocurre, la pieza dental es más propensa a decolorarse.
Esto ocasiona que la dentina del diente, más oscura y amarillenta que el esmalte, se vea, dando ese aspecto descuidado a tu sonrisa.
De igual manera pasa con las bebidas energéticas y deportivas, asociadas con la descomposición del esmalte, en especial, debido a su alta acidez.
Café y té
El té negro y el rojo contienen taninos, una sustancia que tiñe y daña el esmalte; mientras que tu café de la mañana puede ser el culpable detrás de tus dientes amarillentos.
Al igual que el té, el café contienen taninos, pero también cromógenos, moléculas que se pegan al esmalte de los dientes y cambian su color.
Consumir con moderación estos alimentos o procurando una mejor higiene bucal, podrás evitar que tus dientes se manchen.
