La Reserva Federal probablemente tendrá que subir las tasas de interés más de lo esperado ante la solidez de los datos recientes y está dispuesta a tomar medidas más contundentes si la información entrante sugiere que se necesitan acciones más severas para controlar la inflación, dijo el martes el presidente de la Fed, Jerome Powell.
“Los últimos datos económicos han sido más fuertes de lo esperado, lo que sugiere que el nivel final de las tasas de interés será probablemente más alto de lo previsto”, dijo Powell, en declaraciones preparadas para una audiencia ante la Comisión de Banca del Senado estadounidense.
Son las primeras declaraciones del jefe de la Fed desde que la inflación se disparó inesperadamente en enero y luego de que el Gobierno informó de un aumento inusualmente significativo de las nóminas no agrícolas para ese mes.
Si bien parte de esa inesperada fortaleza económica puede haberse debido al clima cálido y otros efectos estacionales, Powell dijo que la Fed era consciente de que también puede ser una señal de que el banco central necesita hacer más para moderar la inflación.
Con ello, el banco central incluso podría volver a implementar aumentos más significativos de tasas que el cuarto de punto porcentual que los funcionarios habían estado planeando mantener.
“Si la totalidad de los datos indica que se justifica un endurecimiento monetario más rápido, estaríamos dispuestos a aumentar el ritmo de las alzas de tasas”, dijo Powell.
Fed probablemente tendrá que subir más las tasas y más rápido: Powell
La Fed celebrará su próxima reunión de política monetaria los días 21 y 22 de marzo, y la publicación este viernes del informe mensual de empleo del Gobierno y el reporte de inflación de la semana que viene serán cruciales para que las autoridades evalúen si nuevamente se quedaron atrás en la curva de inflación o si se pueden apegar a la postura más moderada que planearon en su última reunión.
Pero en cualquier caso, los comentarios de Powell suponen un grave reconocimiento de que el “proceso desinflacionario” del que habló repetidamente en la conferencia de prensa del 1 de febrero podría no ser tan patente.
Aunque la inflación “se ha ido moderando” desde su máximo del año pasado, dijo Powell, “el proceso de volver a situar la inflación en el 2% tiene un largo camino por recorrer y es probable que sea accidentado”.
Los miembros de la Comisión de Banca del Senado harán preguntas a Powell después de que preste su declaración y el miércoles está prevista una audiencia similar ante la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes.
Fueron los primeros comentarios de Powell sobre un tema que ahora está en el centro de la discusión de la Fed, mientras los funcionarios sopesan si los datos recientes resultarán ser un “blip” (accidente), como sugirió uno de sus colegas, o serán vistos como evidencia de que el banco central necesita abordar una economía aún más fuerte de lo que se espera actualmente.
En su comparecencia, Powell señaló que gran parte del impacto de la política monetaria del banco central podría estar aún en ciernes, ya que el mercado laboral sigue manteniendo una tasa de desempleo del 3.4%, un nivel no visto desde 1969, y fuertes aumentos salariales.
En un comentario que bien podría ser aprovechado por algunos demócratas del Senado, Powell sugirió que el mercado laboral podría tener que debilitarse para que la inflación descienda en el vasta sector de los servicios, una parte de la economía intensiva en mano de obra en la que los precios siguen subiendo.
“Para restablecer la estabilidad de precios, tendremos que ver una menor inflación en este sector y es muy probable que se produzca un cierto debilitamiento de las condiciones del mercado laboral”, dijo Powell.