La Comisión de Cultura Física y Deporte (CONADE) ha tenido que enfrentar una serie de problemas burocráticos entre instituciones donde los únicos perjudicados son los atletas. Después de que la titular de la CONADE, Ana Gabriela Guevara, retirara la beca a los deportistas acuáticos, los miembros de estas disciplinas se han visto severamente afectados. Todo ello como resultado al apoyo por parte de Guevara hacia Kiril Todorov quien era el presidente de la Federación Mexicana de Natación y hace un par de semanas fue vinculado a proceso por delito de peculado y fue desconocido de su puesto por parte de World Aquatics (antes, Federación Internacional de Natación) desde enero del 2022.
A pesar de los temas administrativos que han privado de dichos apoyos a los deportistas, ellos siguen trabajando y consiguiendo resultados inéditos. El primer turno fue para la Selección de Nado Sincronizado que logró la proeza de la medalla de oro en la Copa del Mundo de la disciplina después de que su suerte prácticamente estuvo a la deriva. Regina Alferez, María Fernanda Arellano, Daniela Estrada, Itzamary González, Glenda Inzunza, Luisa Rodríguez, Jessica Sobrino y Pamela Nuzhet fueron las encargadas de realizar la coreografía que se acercó a la perfección. Además de haber estado bajo la supervisión de Nuria Diosdado y Joana Jiménez, quienes se han convertido en una dupla referente de México por su destacada actuación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Las atletas mexicanas bailaron al ritmo de Don´t stop me now de la legendaria banda de rock inglesa, Queen. Su perfecta coordinación produjo un impacto mayúsculo que resultó en un puntaje de 270.1584, con lo que pudieron superar a las nadadoras de Italia, Francia y Australia.
Después de la victoria conseguida, los focos se dirigieron totalmente hacia ellas, pues lograron un resultado totalmente inesperado. Y no fue imprevisible simplemente porque la plantilla mexicana no tuviera capacidad para ganar el certamen, sino porque ni siquiera contaban con los recursos para realizar el viaje. Por ello, durante las felicitaciones a las nadadoras, la CONADE simplemente escondió la cabeza y no reconoció, por ningún medio, lo conseguido. A pesar de que sus redes sociales se han mantenido activas en los últimos días reportando lo que pasa con sus atletas en distintas disciplinas. Simplemente como si no existiera para la CONADE la representación mexicana en el nado sincronizado.
La cuenta de Twitter de la Presidencia de México desplegó un mensaje donde felicitó a la selección mexicana de natación por lo conseguido. El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que “de las 10 competidoras, seis pertenecen a la Secretaría de la Defensa y tienen sus sueldos, viáticos y apoyos. Era muy meritorio, pero se habían costeado su viaje”. La cuestión es que la parte operativa para este tipo de competencias le corresponde cubrirlas a la CONADE, no al Ejército ni a los propios deportistas.
La falta de apoyos económicos es un tema perenne en el deporte mexicano. Las nadadoras, para poder costear el viaje a Egipto, tuvieron que optar por otras alternativas y una de ellas fue la de vender trajes de baño en redes sociales. Esta iniciativa fue apoyada por parte de la marca deportiva Saffeti México. Un porcentaje de lo recaudado sería destinado a cubrir sus gastos para esta y otras competencias futuras rumbo a los Juegos Olímpicos de París 2024.
El mayor aporte para acudir al campeonato mundial estuvo a cargo de Fundación Telmex. Arturo Elías Ayub, director de dicha fundación, fue el responsable de brindar el apoyo necesario a las nadadoras.
La pugna burocrática de la CONADE con World Aquatics solamente ha dejado desamparados a los atletas. No es solo el caso de las nadadoras, el clavadista Kevin Berlín también ha tenido que solventar sus gastos mediante la venta de café artesanal que él y su familia se dedican a vender por redes sociales. Los deportes acuáticos son de las disciplinas que más medallas le han brindado a México en la historia de los Juegos Olímpicos y ahora, por una cuestión absurda, corren el riesgo de siquiera participar en clasificatorios para París 2024.
