Imágenes captadas con un dron por el videógrafo Kevin Christopherson en la playa estadounidense de San Onofre, un popular destino para surfear en el área de San Diego (California), muestran al menos a tres grandes tiburones blancos nadando alrededor de decenas de surfistas, que no se percataron de la presencia de los depredadores, y continuaron montando las olas tranquilamente sin sospechar el peligro que corrían.
Para su fortuna, los escualos no mostraron interés alguno en ellos.