Saúl Canelo Álvarez no tendrá la obligación de defender su campeonato del Consejo Mundial de Boxeo al menos hasta marzo de 2024. Así lo anunció el presidente de tal organismo, Mauricio Sulaimán, en entrevista con Broadway Joel. La fecha enmarcada significa que David Benavidez, actual campeón interino de peso supermediano (lo ostenta desde mayo de 2022), tendrá que haber esperado un año entero para recibir su oportunidad por el campeonato del mundo, a pesar de haber ratificado su condición de rival mandatorio.

En marzo pasado, el Bandera Roja derrotó a Caleb Plant, único rival en común con Álvarez. Aunque no pudo noquearlo, como sí lo hizo el tapatío, su exhibición fue contundente y dejó claro que tiene el nivel para contender nuevamente por el cinturón mundial —lo ha ostentado en dos ocasiones, y en ambas lo perdió fuera del ring, por dar positivo a cocaína y por no cumplir con el peso—. Sin embargo, los planes de Canelo no contemplan un duelo próximo con Benavidez, pues se medirá con Jermall Charlo el próximo 30 de septiembre.

El problema no sería tan grande si Álvarez no estuviera acaparando todos los cinturones. Es verdad que ha abierto la puerta para una posible pelea con Benavidez en el futuro. “Claro, quizá pueda suceder en el futuro (la pelea con David Benavidez), ¿por qué no? Habla mucho (Benavidez), esa no es la manera de hacer las peleas, pero no hago mucho caso. Sólo vean su carrera y vean mi carrera, así que no pongo mucha atención en ese tipo de cosas”, señaló en entrevista con 810WHB.

En el boxeo profesional existen cuatro organismos que otorgan campeonatos del mundo. Por obligación, un campeón mundial debe hacer una defensa obligatoria al año (después el peleador decide si hace más combates o si cumple nada más con el reglamentario). En caso de no hacerlo, el título le es retirado para que puedan disputarlo el retador obligatorio y el siguiente peleador clasificado en el ranking.

En este punto, es importante recordar que Canelo Álvarez tiene en su poder los cuatro campeonatos del mundo de su división, supermediano. De manera regular, debería hacer una defensa obligatoria de cada uno de ellos (no todas tan rápido, con cierto espacio, pero sí consecutivas). No ha sido así. En lo que respecta al título verde del CMB, Álvarez no ha hecho una defensa obligatoria desde febrero de 2021, cuando enfrentó a Avni Yildirim.

De de todas formas conserva el cinturón y no ha recibido presión para hacer la pelea contra su rival mandatorio. No han tenido la misma fortuna otros monarcas. Por ejemplo, el año pasado, Josh Taylor, campeón del mundo indiscutido superligero, no accedió a realizar su defensa obligatoria contra José Zepeda. El título le fue retirado y se declaró vacante. Por otro lado, Juan Francisco Estrada, campeón supermosca mexicano, tenía dos opciones en la mesa para diciembre pasado: enfrentar a Román González por el título franquicia del CMB o Joshua Rodríguez por el de la AMB. que si elegía ir por el AMB, en automático renunciaba al CMB y debía olvidarse de la faja.

De hecho Álvarez sabe muy bien lo que es sentir la presión del CMB. En 2016 era el campeón mundial de peso medio de dicha institución. Su rival mandatorio era Gennady Golovkin. En lugar de enfrentarlo, Álvarez decidió dejar el cinturón vacante y bajar una categoría de peso para medirse con Liam Smith. Finalmente terminó enfrentando a Golovkin un año más tarde. No fue mucho tiempo, pero jamás se entendió por qué lo prolongó.

De cualquier modo, la consecuencia se cumplió: no hizo su pelea obligatoria y el título le fue retirado. Un año antes, Miguel Cotto también debía enfrentar a Golovkin. No quiso hacerlo, para pelear con Canelo, y fue multado económicamente (no la cumplió y, en consecuencia, perdió el cinturón sobre le mesa). Las reglas están claras, pero se aplican a conveniencia. No está mal si Canelo no quiere pelear con Benavidez por los motivos que sean. Pero tampoco debe acaparar los cinturones, en este caso el del CMB, si no está dispuesto a defenderlos con quien se ha ganado el derecho deportivamente.

Publicidad