El Foro Económico Mundial de Davos ha publicado un estudio que prevé que la tasa de crecimiento global en 2030 caerá a su tasa más baja en 30 años, por los desafíos que plantea la crisis climática, los conflictos geopolíticos y la ausencia de planificación económica inclusiva y sostenible.
El documento, que ha analizado datos macroeconómicos de 107 países, sitúa a España en un nivel medio bajo de crecimiento económico, pero bien posicionado en lo que respecta a la inclusión de los más desfavorecidos.
En esta categoría figuran, además de España, Chile, Costa Rica, Grecia, Hungría, Italia, Letonia, Polonia, Portugal, Rumanía, Ucrania y Vietnam. En todos ellos, la media de crecimiento económico en el último lustro ha sido del 1.8%.
Por encima de este grupo están los Estados que fomentan tanto la inclusión como la innovación, además de exhibir un desempeño superior a la media en sostenibilidad.
En este grupo figuran economías con los mayores niveles de renta: Austria, Suiza, Alemania, Dinamarca, Finlandia, Francia, Reino Unido, Holanda, Japón y Corea del Sur.
Un tercer grupo lo forman aquellos países cuyo crecimiento se centra en la inclusión y la innovación, aunque con moderados o bajos niveles de sostenibilidad, y del que forman parte, entre otros, Australia, Bélgica, Canadá, República Checa, Estonia, Luxemburgo, Nueva Zelanda, Singapur y los Estados Unidos.
El documento revela que la mayoría de los países “continúan creciendo de manera que no son sostenibles ni inclusivos” y mantienen una limitada capacidad para “absorber o generar innovación y minimizar su contribución a las crisis globales”.