El presidente ruso, Vladímir Putin, cree que sería más conveniente para su país que en las elecciones de noviembre de 2024 ganara Joe Biden, y no Donald Trump, ya que el actual líder estadounidense, es “un hombre con más experiencia, es predecible, es un político de la vieja escuela”.
No obstante, Putin dijo estar dispuesto a trabajar con “cualquier líder de EE.UU. en el que deposite su confianza el pueblo estadounidense”, según lo expresó este miércoles en su respuesta a una entrevista con el periodista Pável Zarubin.
En cuanto al debate abierto en la sociedad estadounidense sobre el estado de salud del inquilino de la Casa Blanca, el jefe de Estado ruso recordó que especulaciones sobre la supuesta incapacidad de Biden circulaban ya hace varios años cuando se reunió con él en Suiza.
“No vi nada de eso. Bueno, sí, él estaba ojeando su papel. Yo estaba mirando el mío, para ser honesto. No hay nada de malo en ello. Pero el hecho de que se golpeara la cabeza al bajar del helicóptero… bueno, ¿quién no se ha golpeado la cabeza en algún sitio? Que arroje la primera piedra”, comentó.
Putin indicó que no se considera cualificado para hacer ningún comentario sobre estas cuestiones médicas y vinculó las especulaciones con la lucha política interior que aumenta en EE.UU. a la luz de la campaña presidencial.
Por lo tanto, dijo, no es la salud del presidente lo que hay que analizar, sino la política.
“Creo que la posición de la actual Administración es muy perjudicial y equivocada. Y se lo dije al presidente Biden en su momento”, recordó.
Trump a vueltas con la OTAN
Preguntado sobre “el pánico que prácticamente ha estallido en Europa” ante un eventual regreso de Trump a la Presidencia, en el contexto de las declaraciones del exmandatario sobre su intención de proteger solo a los miembros de la OTAN que cumplan con sus obligaciones financieras con la Alianza, Putin puntualizó que “Trump siempre ha sido un político que no es del sistema”. “Tiene su propia opinión sobre cómo EE.UU. debe desarrollar las relaciones con sus aliados”, añadió.
“Desde una perspectiva europea, esto no tiene ninguna lógica, les gustaría que EE.UU. siguiera realizando algunas funciones de forma gratuita, que se han mantenido desde la formación de la OTAN”, afirmó el presidente ruso, añadiendo que eso no tiene “ningún sentido”.
Sobre esta cuestión, el presidente ruso trazó un paralelismo entre la forma que EE.UU. se retiró del Protocolo de Kioto por cálculos económicos y las afirmaciones de Trump. “No son nada diferentes” —estimó Putin—, pues Washington “quiere que los europeos aumenten sus gastos de defensa” y paguen por la protección que se les ofrece.
“La OTAN solo es un instrumento de la política exterior de EE.UU., pero si EE.UU. considera que ya no necesita más ese instrumento, es su decisión”, sentenció.
El verdadero “detonante” del conflicto ucraniano
El presidente ruso también fue interpelado sobre la valoración que se hace en Occidente de la reciente entrevista que Putin concedió al famoso presentador estadounidense Tucker Carlson, después de la cual el canciller alemán, Olaf Scholz, y el primer ministro británico, Rishi Sunak, calificaron de “absurdo” lo que apreciaron como un intento de justificar la operación militar rusa con la amenaza de un ataque procedente de la OTAN.
“No dije que el inicio de nuestra operación militar especial en Ucrania se debiera a la amenaza de un ataque de la OTAN contra Rusia. ¿Dónde está eso en mi entrevista? Hay una grabación, que me muestren dónde lo dije”, respondió Putin, precisando que lo que dijo fue que Occidente había engañado sistemáticamente a Rusia al prometer que la OTAN no se ampliaría hacia el este.
“Claro está que nos ha preocupado y sigue preocupando la perspectiva de la incorporación de Ucrania en la OTAN, porque amenazaría a nuestra seguridad y así lo dije. Pero el detonante inmediato fue la completa negativa de las autoridades de Kiev a cumplir los acuerdos de Minsk y los ataques incesantes, con numerosas víctimas, contra las entonces no reconocidas por nosotros durante ocho años repúblicas de Donbass”, resaltó.
También recordó que las repúblicas populares de Donetsk y de Lugansk se dirigieron a Rusia en febrero de 2022 con la petición de ser reconocidas ante la falta de perspectivas de resolución en el marco de los acuerdos de Minsk.
“Las reconocimos, firmamos el conocido acuerdo de amistad y asistencia mutua y cumplimos nuestras obligaciones bajo este acuerdo, en conformidad con la Carta de la ONU. Ya he dicho que no empezamos la guerra, sino que estamos tratando de ponerle término”, declaró.
“Lo único de lo que podemos arrepentirnos”
Asimismo, Putin subrayó que los esfuerzos de Rusia en la búsqueda de una solución por la vía pacífica, en el formato de los acuerdos de Minsk, tropezaron con el engaño de Occidente, lo que fue confirmado tanto por la excanciller alemana Angela Merkel, como por el expresidente francés Francois Hollande, quienes “declararon públicamente que no iban a cumplir estos acuerdos, sino que, sencillamente, buscaban con ellos ganar tiempo para bombear armas al régimen de Kiev”.
“Lo único de lo que podemos arrepentirnos es de no haber iniciado antes las acciones activas, pensando que estábamos tratando con gente decente”, expresó Putin.
Es bueno que “miren y escuchen”
Si bien considera “malo” que los líderes occidentales “tergiversen” sus declaraciones, el jefe del Estado ruso calificó de “bueno” el hecho de que “miren y escuchen lo que yo digo”.
“Si hoy en día no podemos tener un diálogo directo con ellos por alguna razón, que está relacionada con ellos, debemos agradecerle a Carlson que podamos hacerlo a través de él”, añadió.
La política como arte del compromiso
En la entrevista, Zarubin evocó unas declaraciones de David Arajamia, negociador ucraniano para las conversaciones que se desarrollaron en Estambul (Turquía) durante las primeras semanas del conflicto, quien afirmó el pasado noviembre que el entonces primer ministro británico, Boris Johnson, impidió un acuerdo de paz en el conflicto ruso-ucraniano. ¿De qué forma habría podido desarrollarse la situación de no haber tenido lugar aquella intromisión?, preguntó el periodista.
“[Arajamia] dijo que si se hubieran cumplido esos acuerdos, si se hubieran aplicado plenamente los acuerdos que surgieron en Estambul, la guerra habría terminado hace un año y medio”, recordó el mandatario ruso.
Al mismo tiempo, indicó que aquella no fue simplemente la postura de Johnson, sino de Occidente, “sobre todo el mundo anglosajón”, ya que —expresó— “el ex primer ministro Johnson no podía venir por su cuenta, por iniciativa propia, sin consultar a Washington sobre este asunto”.
Al parecer, los aliados occidentales de Ucrania, esperaban “llegar al final victorioso e infligir una derrota estratégica a Rusia”, sugirió Putin.
“Si ven que ese resultado no se consigue, parece que necesitan hacer ajustes. Pero esto ya es una cuestión del arte de la política, porque la política, como se sabe, es el arte del compromiso”, comentó.
“Al parecer, el Sr. Blinken es nuestro hombre”
El jefe de Estado mencionó que uno de los temas abordados con Carlson tras la entrevista fueron las reiteradas menciones del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, a “sus familiares” y a “su bisabuelo” que “había huido de Rusia por pogromos judíos”.
“Y en varios países del mundo, en Europa, en EE.UU., este tema surge constantemente. Repito, surge para demonizar a Rusia, para mostrar qué bárbaros, sinvergüenzas y bandidos viven aquí”, recalcó.
Sin embargo, Putin sugirió que hay que desvíar la atención de los eslóganes políticos y centrarse en los archivos para saber si “el bisabuelo del señor Blinken de verdad se fue del Imperio ruso”.
“Nació, si no me equivoco, en algún lugar de la provincia de Poltava, y después vivió en Kiev y se fue. La pregunta que surge es: ¿cree el señor Blinken que Kiev y los territorios circundantes son territorios rusos autóctonos?”, planteó.
“Así que no había Ucrania allí, si él dice que huyó de Rusia. Al parecer, el Sr. Blinken es nuestro hombre”, concluyó el presidente.
El pasado de Alemania
Zarubin también llamó la atención sobre una serie de artículos que acaban a publicarse en medios alemanes que revelan que el abuelo de la ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, era un apasionado nazi. El periodista preguntó a Putin su opinión sobre si podría transmitirse “a nivel genético” en Alemania el “virus del nacionalsocialismo”.
El líder ruso respondió que se opone a que “las generaciones actuales de alemanes asuman la responsabilidad de lo que hizo Hitler y sus secuaces, no solo en Alemania, sino en otras partes también”.
“Me parece que esto no es justo, y no hay necesidad de ello. Tenemos que partir de las realidades de hoy, ver quién está haciendo qué y qué política está llevando a cabo”, precisó.
¿Carlson arrestado como Assange?
En medios de los llamamientos a imponer sanciones contra Carlson por haber entrevistado al presidente ruso, Zarubin llegó a preguntar a Putin si considera posible el arresto del expresentador de Fox News en EE.UU.
Ante este hipotético escenario, el mandatario ruso recordó el caso de Julian Assange, acusado en EE.UU. por publicar documentos secretos y recluido en una prisión británica, y afirmó que, si bien es difícil acusarlo por el mismo delito —”porque no ha tocado ningún secreto”—, estimó que “en teoría hoy todo es posible en EE.UU.”.
“Para Carlson esto sería triste, no le envidio, pero es su decisión, conocía bien los riesgos, pero para que la gente de todo el mundo entienda lo que es una dictadura liberal-democrática moderna, que está claramente representada en la clase dirigente actual de EE.UU., sería bueno, mostrarían su verdadera cara”, estimó.