La policía sueca desalojó el martes por la fuerza a Greta Thunberg y a otros activistas climáticos que bloqueaban por segundo día consecutivo la entrada al edificio del Parlamento, emplazado en el centro de Estocolmo.
Dos policías levantaron a Thunberg del frente del edificio y se la llevaron a rastras antes de depositarla en el suelo a unos 20 metros de la puerta que había estado obstruyendo.
Thunberg y otras decenas de activistas ecologistas comenzaron a bloquear las principales entradas del Parlamento sueco en una sentada de protesta contra los efectos del cambio climático y la supuesta inacción política.
Los activistas se marcharon el lunes por la tarde, pero volvieron a protestar ayer por la mañana.
Thunberg, de 21 años, se convirtió en el rostro de los jóvenes activistas climáticos cuando sus protestas semanales, que comenzaron en 2018, frente al Parlamento sueco se convirtieron rápidamente en un movimiento juvenil global con grandes concentraciones en todos los continentes.
El año pasado, Thunberg fue detenida por la policía o expulsada de protestas en países como Suecia, Noruega y Alemania.
El mes pasado, un tribunal británico la absolvió de los cargos de un delito de orden público, ya que un juez dictaminó que la policía no tenía poder para detenerla a ella y a otras personas en una protesta en Londres el año pasado.