“La fotografía está fuera de todo control, implica siempre al azar, que acaba siendo más fuerte que el deseo”, ha considerado este miércoles la fotógrafa francesa Sarah Moon, con más de medio siglo de carrera, una mujer que en los años sesenta revolucionó las imágenes del mundo de la moda.
Por primera vez en Barcelona y, por primera vez en su vida ofreciendo una rueda de prensa, Moon ha hablado hoy de la exposición ‘El tiempo se detiene’, que se podrá ver entre mañana jueves y el próximo 22 de diciembre en la Fundación Foto Colectania.
Sus responsables le han dado “carta blanca” para que la organizara como quisiera, eligiendo, incluso, el color de las paredes en las que se exhiben las ochenta imágenes escogidas, algunas de ellas inéditas.
Valorada como una de las artistas más emblemáticas de la fotografía contemporánea, no ha decepcionado respondiendo a las preguntas de los periodistas con afirmaciones como que la fotografía es “un instante que no se puede reproducir, igual que la existencia”, aunque también es “el recuerdo”, algo que revela “momentos ligados a emociones”.
Nacida en 1941 en Francia, comenzó su carrera como modelo en Londres y París, pero pronto se puso detrás de la cámara, trabajando para marcas como Cacharel, Chanel o Dior.
Con un estilo propio, Sarah Moon destaca por sus imágenes “misteriosas, etéreas”, por un universo onírico, creado a partir de técnicas como el desenfoque, el movimiento o las exposiciones largas.
Sintiéndose una privilegiada porque, a pesar de su edad, todavía tiene trabajo, lo que la “mantiene en pie”, no ha rehuido que la mayoría de sus obras son en blanco y negro porque, seguramente, sueña en esos colores, pero, además, porque le encanta el “misterio” de la cámara en blanco y negro, su aportación de intimidad.
“El blanco y negro -ha abundado- supone mucha más distancia con respecto a lo real, que es el color. No es que no quiera ver la realidad, pero prefiero ver en la sombra más que en la luz, la comprendo mejor”.
Estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado
En cuanto a cómo selecciona el motivo de sus fotos, Sarah Moon ha sido muy clara.
“No es algo que escoja, los motivos se imponen cuando se trata de fotografiar moda, porque hay quien decide cómo hay que hacerlo. Cuando se fotografía un paisaje o un pavo real es porque se ven, pero es el azar quien escoge. Es estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado”, ha apuntado.
A su juicio, disparar una foto es algo que se “improvisa”, aunque no ha obviado que hay que tener una cierta actitud, “una disponibilidad total de estar abierto a poder plasmar todo lo que pasa por delante de los ojos, todo aquello que es un eco para cada uno”.
Citando a Henri Cartier Bresson, ha precisado que “uno no toma una fotografía, es la fotografía la que nos toma a nosotros”.
A pesar de ello, ha ahondado en que uno no se convierte en fotógrafo en el momento de disparar, sino cuando escoge entre todo lo que ha retratado y se quedan en el cajón las imágenes fallidas.
“El tiempo -ha rematado- es como un test, lo somete toda a prueba. El instante es algo extremadamente ínfimo”.
En cuanto a cómo ve la fotografía del mañana, ha afirmado que no le preocupa “excesivamente”, pero sí ha mostrado su recelo con respecto a la Inteligencia Artificial. “¿Corresponderá sólo a una época o comportará que nadie trabaje?”, se ha preguntado.
“Yo utilizo el photoshop, pero no quiero que la Inteligencia Artificial acabe sustituyendo mi mente”, ha precisado.
La exposición ‘El tiempo se detiene’, además de mostrar fotografías, algunas de ellas de gran tamaño y en color, incluye algunos libros y cinco películas concebidas por ella, producidas por Take Five Prod.
La película ‘Hors Saison’ (Fuera del tiempo), realizada este mismo año, se presenta por primera vez en Foto Colectania.
Las otras filmaciones que se podrán ver son: ‘Circuss’ (2003); ‘Le Petit Chaperon Noir (La Caperucita Negra), de 2010; ‘Où va le blanc…(Dónde va el blanco), de 2015; y ‘Demain (Mañana), de 2017.
Por otra parte, mañana en la Filmoteca de Cataluña se presentará una sesión con dos de sus filmes, ‘The Mermaid of Auderville (La sirena de Auderville), de 2007, y ‘Robert Delpire, le montreur d’images (Robert Delpire, el exhibidor de imágenes’, de 2009.
EFE