La violencia desatada en Sinaloa, con epicentro en la ciudad de Culiacán, dejó hasta ayer jueves un saldo de 12 víctimas mortales, todos ellos varones, según ha informado la Fiscalía General del Estado en su último comunicado.

De los doce fallecidos en 11 incidentes, ocho ya han sido identificados y entregados a sus familiares, mientras que los otros cuatro permanecen todavía sin identificar. Además, hay al menos 11 heridos por arma de fuego, nueve hombres y dos mujeres, en otros siete episodios.

En estos días, la Fiscalía Especializada en Desaparición Forzada de Personas ha registrado 20 denuncias presentadas por familiares: tres en el municipio de Guasave, otras tres en Mazatlán y la mayoría de ellas, 14, en Culiacán.

Asimismo, en los primeros cuatro días de esta semana se ha reportado el robo de 31 vehículos.

La violencia no ha disminuido con el transcurrir de los días, como demuestra el hecho del gran número de delitos constatados durante el jueves: ocho robos de automóviles, seis secuestros, un herido y tres fallecidos.

Los enfrentamientos se han desatado entre grupos del crimen organizado presuntamente ligados al narcotráfico, después de la captura de Ismael ‘Mayo’ Zambada, que fue entregado por uno de los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán a las autoridades de EE.UU. 

Así, los actos violentos se estarían produciendo en territorio dominado por gente de Zambada, al que estaría intentando ingresar la facción del Cartel de Sinaloa de ‘Los Chapitos’, liderada por hijos de ‘El Chapo’.

La situación está afectando a todos los ámbitos de la vida en el centro del estado de Sinaloa, donde se suspendieron las clases presenciales en municipios de todos los niveles educativos, mientras que los supermercados han reducidos sus horarios por miedo a las balaceras que se producen a cualquier hora del día o de la noche.

Desde la Alianza para el Desarrollo y Competitividad de las Empresas (Adecem) informan que muchas empresas han cerrado y estiman las pérdidas en más de 1.200 millones de pesos (casi 62 millones de dólares) por la paralización de la producción y la distribución.

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