La economía mexicana medida a través del IGAE se contrajo en agosto por primera vez desde abril, afectada por el mal desempeño en los sectores primario y secundario, según datos publicados ayer martes por el Inegi.
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) cayó 0.3% respecto al mes previo, lo que significó el primer tropiezo desde la contracción de 0.7% en abril pasado, de acuerdo con datos desestacionalizados del instituto de estadísticas.
Al interior del indicador, las actividades agropecuarias o primarias cayeron 9.1%, el mayor retroceso desde enero, mientras que las actividades industriales o secundarias cedieron 0.5%, la primera caída desde abril.
Dentro de la actividad industrial destacó la contracción de 3.7% de la construcción, la más profunda desde septiembre del año pasado.
En tanto, el sector terciario o de servicios avanzó 0.3%.
A tasa anual, el indicador creció 1%, el avance más moderado desde abril pasado. Las actividades primarias se contrajeron 2.1%, las secundarias 0.3%, y las terciarias aumentaron 2.2%.
“La actividad económica regresó a terreno negativo, incrementando las señales de enfriamiento, particularmente en el sector industrial manufacturero”, expuso en una nota de análisis el grupo financiero Monex.
Agregó que se necesitarán mayores elementos para alejar una lectura de desaceleración en la economía rumbo al PIB del tercer trimestre.
El 30 de octubre el Inegi publicará los datos oportunos o preliminares del comportamiento de la economía en el tercer trimestre.
“Hacia delante, en los últimos meses de este año, se podría observar menor dinamismo en la actividad económica debido al proceso de cambio de la administración federal y por el impacto rezagado de la política monetaria restrictiva”, señaló en un reporte el grupo financiero Valmex.
Agregó que en 2025 la expectativa de consolidación fiscal anticipa un menor crecimiento.
Citibanamex indicó en un análisis que el crecimiento acumulado del IGAE en los primeros 8 meses del año (1.9%) se ubicó por muy debajo del registrado en el mismo periodo de 2023 (3.4%), lo que ilustra el debilitamiento de la actividad productiva observado desde finales de 2023.
No obstante, estimó que pese al retroceso de agosto y considerando la información oportuna o preliminar a septiembre, el desempeño del tercer trimestre en su conjunto será ligeramente mejor al que había anticipado, dada cierta recuperación de las manufacturas y resiliencia de la construcción en el margen.
Para el cuarto trimestre previó un estancamiento a medida que la expansión de la economía estadounidense pierda tracción, el gasto público siga contrayéndose, las condiciones en el mercado laboral se relajen, las tasas de interés reales permanezcan elevadas, y niveles altos de incertidumbre política afecten negativamente decisiones de inversión.
Consideró que, ante la mejoría en sus perspectivas para el tercer trimestre, ahora estima una expansión de 1.4% en todo 2024, ligeramente mejor que el 1.3% calculado previamente.
En cualquier caso, significará una desaceleración de la economía frente al 3.2% de 2023.
El IGAE permite conocer y dar seguimiento a la evolución del sector real de la economía en el corto plazo, de acuerdo con el Inegi.
La actividad económica se habría contraído 0.1% en septiembre respecto al mes previo, según cifras preliminares publicadas ayer por el instituto. A tasa anual, habría registrado un avance de 0.5%.