La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, leyó una carta que enviará a Donald Trump, en la que amaga con que “a un arancel, vendrá otro en respuesta”, tras la amenaza lanzada ayer por el presidente electo de Estados Unidos al anunciar que impondrá un arancel de 25% a todos los productos importados de México.
“No es con amenazas ni con aranceles como se va a atender el fenómeno migratorio y el consumo de drogas en Estados Unidos; se requiere cooperación y entendimiento recíproco”, dijo la mandataria en su conferencia matutina.
“A un arancel vendrá otro en respuesta, y así hasta que pongamos en riesgo empresas comunes”, agregó.
Claudia Sheinbaum ejemplificó que entre los “principales exportadores de México a Estados Unidos” están las automotrices General Motors, Stellantis y Ford Motors, que llegaron al país hace 80 años.
“¿Por qué ponerle un impuesto que las ponga en riesgo? No es aceptable y causaría a Estados Unidos y a México inflación y pérdidas de empleo”, consideró.
La mandataria se dijo convencida de que la fortaleza económica en la región de Norteamérica “radica en mantener nuestra sociedad comercial”, y con esto ambos países pueden seguir siendo más competitivos “frente a otros bloques económicos”.
En el escrito, que será enviado al próximo presidente estadounidense, indica que México ha desarrollado “una política integral de atención a las personas migrantes”, que ha dado como resultado, de acuerdo con cifras de la Patrulla Fronteriza y de Aduanas (CBP por sus siglas en inglés), una reducción del 75% de diciembre del 2023 a noviembre del 2024 de los encuentros en la frontera.
“Está claro que debemos arribar conjuntamente a otro modelo de movilidad laboral que es necesario para su país y dé atención a las causas que llevan a las familias a dejar sus lugares de origen por necesidad. Si un porcentaje de lo que Estados Unidos destina a la guerra, se dedica a la construcción de paz y al desarrollo, se estará atendiendo de fondo la movilidad de las personas”, señaló.
También sostuvo que “la epidemia de fentanilo” es “un problema de consumo y de salud pública de la sociedad” estadounidense, por lo que México colabora “por razones humanitarias”.
Precisó que en 2024, las autoridades mexicanas han confiscado toneladas de diferentes drogas y 10 mil 340 armas, además de detener a 15 mil 640 personas por delitos relacionados con el narcotráfico.
Asimismo, argumentó que “los precursores químicos” para fabricar estas drogas sintéticas “entran de manera ilegal” a México, Estados Unidos y Canadá procedente de Asia.
Por último, Sheinbaum sentenció que Trump “debe estar al tanto también del tráfico ilegal de armas” de Estados Unidos, de donde provienen el 70% de las que se incautan en México.
EFE
