Un aficionado israelí falleció el domingo pasado durante el Clásico entre el Real Madrid y el Barcelona en el Santiago Bernabéu.

Igal Brodkin, de 50 años y seguidor del Real Madrid, sufrió un paro cardiaco cerca del minuto 52, justo después de que Kylian Mbappé falló un penalti que pudo ser el 3-1 a favor de los merengues. Al final ganó el equipo de Xabi Alonso 2-1.

Brodkin perdió el conocimiento repentinamente, según testigos presenciales. Varios aficionados empezaron a pedir auxilio y suplicaron que se detuviera el partido. Incluso el portero Thibaut Courtois intentó llamar la atención del árbitro, pero el encuentro continuó.

El equipo médico del estadio actuó con rapidez, prestando primeros auxilios en las gradas antes de trasladar urgentemente al aficionado al hospital de La Paz.

A pesar de los esfuerzos de los médicos no pudieron salvarlo y falleció pocas horas después.

TESTIMONIO

“Mi padre ha sido un fanático del Real Madrid desde 2009. Transfirió su amor por el club a cada uno de nosotros, toda nuestra familia somos madridistas apasionados. Cada día llevo conmigo un tatuaje del club en mi cuerpo como símbolo de nuestro profundo vínculo y admiración como familia al equipo”, escribió Sean, uno de sus hijos, en las redes sociales de la ‘Peña Madridista Israel’.

“A lo largo de los años, mi padre cumplió un sueño, se llevó a cada uno de sus hijos, incluyendo a mi madre varias veces, a Madrid para ver jugar al Real Madrid. Esos viajes y experiencias estuvieron entre los momentos más felices de su vida. Lamentablemente, durante uno de estos partidos, inmediatamente después de fallar el penalti de Kylian Mbappé, tuvo un paro cardíaco repentino dentro del estadio. A pesar de los esfuerzos inmediatos de reanimación, no pudo ser revivido. Para nuestra familia, el Real Madrid no fue solo un equipo, sino un vínculo compartido, una pasión de toda la vida que nos unió. El Real Madrid fue, y siempre seguirá siendo, parte de quién fue mi padre y quiénes somos”, señaló.

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