Julio César Chávez, legendario exboxeador mexicano reveló que su hijo Omar ingresó a la clínica de rehabilitación que maneja el excampeón mundial en Tijuana para tratar sus adicciones al juego y a las drogas.
Mientras la familia de Chávez espera que inicie el juicio contra Julio César Júnior por delincuencia organizada y tráfico de armas, el gran excampeón mundial reconoció que su otro hijo enfrenta un problema de adicciones.
“Omar tenía un mes muy bien entrenando en Culiacán. Llegó a Tijuana… Es el hijo que ha resentido más la separación de sus padres piensa que no lo quiero.
“Es obsesivo y compulsivo para el juego, tiene ese problema y aparte estaba tomando las pastillas que estaba tomando Julio”, indicó Chávez padre en una entrevista con Adela Micha.
INTERNADO
“Le leí la cartilla, lo mandé a llamar a Tijuana y lo metí a la clínica. Está consciente de que la regó, ahí va a estar al menos un mes”, explicó Chávez padre, quien explicó cómo encontró a su hijo y por qué decidió internarlo en su clínica de rehabilitación.
“Se fumó un churro de marihuana que le ofreció alguien, un amigo, y se puso como loquito, andaba en las calles gritando que lo querían secuestrar y paranoico”, dijo el gran JC, quien confirmó que tanto Omar como Julio César Júnior pelearán en una exhibición a principios de 2026.
“Pese a esto, se va a preparar porque va a pelear, Julio y él (Omar). La pelea va a ser para enero, es el 24 de enero en San Luis Potosí, iba a ser en diciembre, pero la aplacé para que estén bien los dos y van a pelear los dos”, confirmó.
