Xalapa (SPI).– La quiebra financiera del Gobierno de Veracruz provocó el cierre de al menos 12 Ayuntamientos, protestas, cierres de carreteras, tomas de casetas de peaje y el sabotaje a una presa que abastece de agua a cerca de medio millón de habitantes de la zona sur del estado.
En las principales ciudades, como Xalapa, Veracruz, Boca del Río, Córdoba, Orizaba y Coatzacoalcos hubo protestas de maestros, estudiantes normalistas, personal médico, taxistas, deportistas paraolímpicos, así como alcaldes, quienes mantienen en su poder la sede del Poder Ejecutivo del Estado y Casa Veracruz.
Un toital de doce Ayuntamientos decidieron cerrara sus puesrtas y dejar de ofrecr servicios a los ciudadanos a asegurar que el Gobierno estatal no les ha depositado sus participaciones federales para poder operar.
Desde muy temprano la carretera Xalapa-Veracruz fue cerrada a la altura de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) por parte de estudiantes de la Escuela Nornal “Manuel Suárez Trujillo” que exigieron al Gobierno del estado la entrega de recursos del Fideicomiso de Manutención.
El profesor Usiel Pimentel indicó que el Gobierno del estado les debe 130 millones de pesos por este concepto que no ha sido pagado en los últimos seis meses, y reprochó que la respuesta de la autoridad sea que no tienen recursos.
Por su parte, atletas con discapacidad se manifestaron en la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) para demandar el pago de becas.
La presidenta de Deportes Sobre Silla de Ruedas, Marta Reyes Domínguez, señaló que ante la falta de pago está en riesgo la participación de deportistas en campeonatos nacionales.
Dijo que no cuentan con recurso y que el único camión para los atletas con discapacidad tiene cuatro meses descompuesto y se encuentra en Tlaxcala.
A estas manifestaciones se sumó la de los integrantes de Antorcha Campesina que ya cumplieron una semana en plantón en la plaza Sebastián Lerdo de Tejada, para reclamar el pago de recursos pendientes para la organización liderada por la ex diputada local Minerva Salcedo Baca y su esposo, Samuel Aguirre.
En tanto, en la zona de Veracruz-Boca del Río, personal médico y de enfermería protestaron e las calles para denunciar que en hospitales de las ciudades enfrentan la falta de pago de prestaciones a personal médico, de enfermería, administrativos y operativos, así como el desabasto de medicamentos, lo cual es consecuencia de la insuficiencia presupuestal estatal.
Un grupo de médicos, enfermeras y personal administrativo y operativo cerró la avenida 20 de Noviembre, que se localiza frente al nosocomio, para demandar que les sean depositados los recursos pendientes.
Eleazar Rodríguez Tapia, auxiliar de Enfermería del Hospital de Alta Especialidad de Veracruz, refirió que el director Nicolás Chantiri Pérez solo les da largas a sus demandas, pues promete cada quincena que les depositarán los recursos pero no se reflejan en sus estados de cuenta.
“De enero a la fecha es el retroactivo que le deben al personal administrativo y para médicos y enfermería es de mayo a la fecha, también nos deben uniformes y los pagos por alto riesgo”, agregó.
Por su parte, el director del Hospital General de Boca del Río, Fernando Antiga Tinoco, reconoció que existe un desabasto de medicamentos del 60 por ciento en los meses recientes, lo cual trae como consecuencia que los pacientes deban comprar las medicinas en farmacias privadas.
En la región de sur de la entidad, habitantes del municipio del municipio de Tatahuicapan rompieron las tuberías de la presa Yuribia para exigir el pago de cerca de 80 millones de pesos prometidos por la administración duartistas para obras en sus comunidades cambio del agua.
Con el sabotaje a la presa, cerca de medio millón de habitantes de los municipios petroleros de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque se quedaron sin agua potable.