El escritor cubano Alejo Carpentier, autor de “Guerra del tiempo”, “El reino de este mundo” y “El siglo de las luces”, es recordado a 38 años de su muerte por su estilo barroco, así como por su importancia en las letras latinoamericanas.

Por dicha importancia el gobierno de Cuba declaró Patrimonio de la Nación la casa del escritor, ubicada en el Vedado habanero, así como los objetos personales que se encuentran en ella.

En dicho lugar hay diferentes piezas como su biblioteca, discoteca, máquina de escribir, entre otras cosas de valor, así lo informó el portal El Telégrafo.

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Carpentier es catalogado uno de los autores más influyentes del llamado “boom” latinoamericano, junto con el colombiano Gabriel García Márquez, el peruano Mario Vargas Llosa, el argentino Julio Cortázar y el mexicano Carlos Fuentes, entre otros.

Su literatura era fiel reflejo de lo que alguna vez afirmó en el sentido de que Hispanoamérica era el barroco americano que abre paso a la imaginación y fantasía, basado en un devenir histórico.

De acuerdo con la biografía que de él difunde el Instituto Cervantes, Alejo Carpentier y Valmont nació el 26 de diciembre de 1904, en La Habana, Cuba, fruto del matrimonio de un arquitecto francés y una pianista rusa.

Cursó la educación básica en su ciudad natal y con tan sólo 12 años se trasladó a París, donde asistió al liceo Jeanson de Sailly para iniciar estudios musicales. Al regresar a su país en 1921 estudió arquitectura, aunque no finalizó la carrera.

En 1924 fue nombrado jefe de la revista “Carteles” y en 1927 fue encarcelado por su actividad política de oposición al dictador Gerardo Machado. Un año después se trasladó a París para dedicarse a actividades relacionadas con la música.

En 1944 se mudó a Caracas, Venezuela, donde se dedicó al periodismo radiofónico y al mismo tiempo fungía como profesor universitario y columnista en distintos periódicos.

Ese mismo año publicó su compilación de cuentos “Viaje a la semilla”. Le siguió el ensayo “La música en Cuba” (1946) y la novela “El reino de este mundo” (1949).

En el prólogo de esta obra el escritor explicó su relación con la creación de este libro, al igual que génesis del concepto de “lo real maravilloso”, en sus propias palabras dice que:

“A cada paso hallaba lo real maravilloso. Pero pensaba, además, que esa presencia y vigencia de lo real maravilloso no era privilegio único de Haití, sino patrimonio de la América entera”.

La definitiva consagración como escritor, destaca el sitio “biografiasyvidas.com”, debió llegar con la publicación de “Los pasos perdidos” (1953), novela en la que un musicólogo antillano es el encargado de rescatar raros instrumentos en un país sudamericano.

De su estadía en Venezuela surgió la idea para la novela corta de “El acoso” (1956), donde retoma temáticas de política y psicología. Le siguieron las novelas “Guerra del tiempo” (1958), así como una de sus obras más reconocidas “El siglo de las luces” (1962).

Durante los años 70 publicó “La consagración de la primavera” (1978), “Los convidados de plata” (1973) y “El arpa y la sombra” (1979), novela que relata un inventario de hazañas y debilidades de Cristóbal Colón.

En 1978, Carpentier se convirtió en el primer autor latinoamericano en recibir el Premio Cervantes; dos años después obtuvo el Medicis Extranjero.

El prolífico escritor murió el 24 de abril de 1980, a los 76 años, en París, dejando una profunda huella en la narrativa de la literatura universal.

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