El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) confirmó la legitimidad del Códice Maya de México, antes conocido como Códice Grolier, que data del periodo Postclásico temprano y aseguró que se trata del manuscrito mesoamericano legible más antiguo conocido hasta hoy.
En conferencia de prensa, Diego Prieto, su titular, indicó que el documento que se encuentra entre los libros más raros del mundo y hallado en el estado de Chiapas en la década de los 60, es un “documento prehispánico, auténtico que nos remite al universo simbólico de la cultura maya”.
Luego de un estudio multidisciplinario realizado por investigadores encabezados por José Antonio Ortiz Lanz, en 2017, y coordinado por Sofia Martínez del Campo y Baltazar Brito Guadarrama, resolvieron las incógnitas labradas en torno a él, y concluyeron que el documento es legítimo.
“Se trata de uno de los pocos códices prehispánicos que hay en el mundo y uno de los pocos códices mexicanos que hay en este país”, declaró el titular del INAH, quien dio a conocer que el documento será resguardado por la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia en el Museo Nacional de Antropología (MNA).
La historia de este documento resultó una polémica, fue encontrado en una cueva en la década de los 60 y adquirido por el coleccionista Josué Sáenz, y en 1971 se presentó en la exposición Ancient Maya Calligraphy en el Club Grolier de Nueva York, de donde tomó su nombre.
Durante años, especialistas y académicos discutieron su legitimidad, aludiendo de que se trataba de un documento apócrifo, un códice impreso sobre papel prehispánico con semejantes escrituras y materiales con los que los mayas trabajaban en su época.
Diego Prieto indicó que las primeras dudas que despertó el documento en los años 60 se debieron al desconocimiento de su contexto de origen, y agregó que, tras exhibirse en Nueva York, despertó polémica entre la comunidad académica, debido a la apariencia y singularidad de su contenido que guardan tanto similitudes como diferencias con los códices mayas de Madrid, el Dresde y el de París, los códices hasta ahora reconocidos como mayas.
Para la investigadora del INAH, Sofía Sánchez el Campo, la originalidad del documento, “aporta una nueva lectura del contenido iconográfico ritual, aporta unas fechas rituales en las que se pudo utilizar el documento y confirma que el estilo del códice es original, no es apócrifo ni mucho menos una reproducción elaborada con base en otros manuscritos u objetos prehispánicos”.
Consideró que el análisis de materiales al documento tras el estudio, aporta la identificación del azul maya y la grana cochinilla, en el sentido de que al practicarse varias técnicas científicas de análisis, los resultados son complementarios.
“Es decir, no se usó una sola técnica que nos diga y quedara duda, sino que se ven reforzadas las técnicas aplicadas por los investigadores”, dijo.
En su oportunidad, Baltazar Brito Guadarrama, director de la Biblioteca Nacional de Antropología, reveló que el códice culturalmente aporta una nueva lectura al mundo maya.
“Es fundamental que solo conocemos cuatro códices mayas y este sería el primero o el cuarto por ser el más antiguo. Aporta un gran conocimiento para la arqueonomía, porque nos da un aspecto desconocido y se confirma todo lo dicho sobre los movimientos de Venus”, refirió
En ese sentido, el INAH dio a conocer la realización del simposio “El Códice Maya de México, antes Grolier”, con el objetivo de difundir los resultados obtenidos durante el estudio multidisciplinario realizado en 2017.
A celebrarse este jueves y viernes en el Museo Nacional de Antropología, participarán casi una veintena de especialistas, quienes ahondarán en los estudios realizados y abarcarán los antecedentes históricos, el análisis de la técnica de manufactura, su estado de conservación y los deterioros sufridos a lo largo de su historia por casusas externas.
Incluido un ataque de insectos; la identificación de pigmentos y colorantes mediante diversas técnicas científicas; el estudio antropofísico de las figuras representadas y el análisis del estilo; la iconografía y el contenido ritual.
En ese marco, se anunció que el 27 de septiembre se llevará a cabo la exposición “El Códice Maya de México” en el marco de la XXIX Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH), que tendrá lugar del 27 de septiembre al 7 de octubre en el MNA.