A sus 68 años y tras cinco décadas de trayectoria, el artista mexicano Germán Montalvo afirma a EFE que el diseño gráfico es un ejercicio muy motivante: “hacer diseño gráfico para mí no es un trabajo, es una forma de vida y lo hago siempre con un gran cariño y con un compromiso conceptual”.

Su obra creativa abarca desde el cartel de cine hasta la joyería, pasando por el diseño editorial y la cerámica, pero siempre con una intencionalidad muy marcada, para que su mensaje visual no sea solo atractivo, sino que invite a la reflexión.

“Trato que a la gente le pueda crear un cierto shock cultural”, señala a propósito de su exposición retrospectiva “Germán Montalvo. Diseño gráfico para la cultura”.

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La muestra, que del 29 de febrero al 26 de abril estará abierta al público en el Instituto Cultural de México de Madrid, es la primera exposición individual del reconocido diseñador en España y forma parte de la sección Off del Madrid Design Festival 2024.

El talento de Montalvo también ha estado presente en países como Brasil, Japón, Canadá, Polonia y Estados Unidos y ha recibido múltiples reconocimientos, entre los que destacan el Premio Willy de Majo otorgado por la Bienal Internacional del Cartel en México, el Premio Mexicano de Diseño que entrega la Academia Mexicana de Diseño y la Medalla al Mérito en Artes del Congreso de la Ciudad de México.

La disciplina de hacer arte

Para Germán Montalvo las horas de trabajo son “jornadas larguísimas, desde las seis de la mañana hasta las once de la noche, haciendo una u otra cosa”.

Combina su vida familiar con la docencia en la universidad, el diseño editorial y cada semana realiza un cartel, mediante fotomontajes hechos a mano, para promover los miércoles de jazz en el Sibarita NY de Puebla.

“Si no hay motivación, es muy difícil”, asegura el artista, quien cuenta que cada diseño lo concibe primero en su mente y luego lo va depurando y enriqueciendo con tipografías e ideas conceptuales extraídas de su propia cultura.

El diseñador sostiene que su “trabajo se explica desde lo sonoro”, porque “la música ha sido un elemento de compañía y de aprendizaje”, pero también adquiere dimensión a partir de su gusto por el cine, el teatro, la literatura y la danza contemporánea.

Insiste en que la libertad de creación que debe existir para que fluyan las buenas ideas en el diseño gráfico, principalmente en las jóvenes generaciones, a ellos -dice- se les debe exigir que su trabajo tenga intención conceptual.

La exposición “Germán Montalvo. Diseño gráfico para la cultura”,  inspirada en sus 50 años de labor asociada a los ambientes culturales, incluye carteles diseñados para diferentes eventos, que abarcan desde principios de los años 90 hasta el 2024.

Nacido en Omealca (Veracruz) en 1956, Montalvo trabajó desde muy temprana edad en reconocidos talleres de México e Italia en donde adquirió conocimientos en tipografía y artes gráficas que serían fundamentales durante toda su trayectoria profesional.

Su obra se ha presentado en países como México, España, Brasil, Japón, Canadá, Polonia y Estados Unidos.

Desde hace varias décadas combina su labor creativa con la docencia en instituciones como la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad de las Américas Puebla. 

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