Un repaso a través de la historia y el uso de los recursos naturales en la manufactura de los textiles, así como en sus diferentes técnicas de elaboración presenta la exposición “México textil”, que a partir del 14 de abril próximo abrirá sus puertas en el Museo de Arte Popular (MAP), en la capital del país.
Se trata de una pequeña revisión de lo que es la indumentaria mexicana, a través de 300 piezas que muestran ejemplos de las épocas prehispánica, virreinal y contemporánea, aseguró en conferencia de prensa Walter Boesterly, director del MAP.
Para Gerardo Gómez, coordinador de museografía del citado recinto, la instalación representa una oportunidad de ver los textiles mexicanos, entre sillas para montar caballo, huipiles, telar de cintura, tapetes, sarapes, rebozos y algunas piezas hechas en cerámica y obra religiosas, estas últimas haciendo mención a la época prehispánica.
Destacan además obras de la Catedral Metropolitana, como casullas, mitras y frontales; del Museo Franz Mayer, del Museo del Templo Mayor, del Antiguo Palacio del Arzobispado, del Museo Nacional de Historia “Castillo de Chapultepec”, del Museo Nacional de Antropología, por mencionar algunos.
Magdalena Viner, curadora de la exposición, destacó que entre los núcleos temáticos figura la sección en la que se ofrece un discurso del textil en el arte contemporáneo, haciendo énfasis en el tema de la identidad.
Además de la industria generada por los usos y costumbres, sumados al lenguaje natural de expresiones artísticas, así como a la fantástica imaginación de los diferentes pueblos y etnias.
La iconografía utilizada se deriva de la limitante que significa el uso del telar de cintura recto, que sólo permite ciertas formas geométricas; sin embargo, eso no ha sido un obstáculo para las mágicas manos y mentes de los artesanos mexicanos.
A pesar de los grandes empresas y competencias que existen en el mercado, Boesterly pugnó porque se reconozca y pague lo justo a quienes fabrican estas prendas 100 por ciento mexicanas, hechas a mano.
Refirió que son los extranjeros quienes adquieren este tipo de prendas a precios altos, pero cuando se trata de mexicanos “resulta que está caro”.
“Si estamos dispuestos a pagar por las firmas internacionales cuando utilizan manos artesanales en materia prima, no queremos pagar a nuestros artesanos, su materia prima, su magia, sus manos, el haber conservado estos oficios y tradiciones a través de los años”, cuestionó el también museógrafo.
Agregó que hay que conservar y mantener las tradiciones, pero también se requiere innovar, pues parte de la problemática artesanal que tiene el mundo y en especial en México, consiste en que al no innovar, la gente no adquiere las cosas que se tienen que ir adaptando a una vida diferente.
La exposición “México textil” estará vigente hasta el 24 de junio en el recinto situado en Revillagigedo 11, en la zona centro de la Ciudad de México.
