El juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha mantenido la declaración de la jugadora Jenni Hermoso el 2 de enero pese a las protestas de las defensas de los investigados en el denominado caso Rubiales, que solicitaron cambiar la comparecencia por estar fijada en un período declarado inhábil por ley.
Todas las defensas, incluida la del expresidente de la RFEF Luis Rubiales, abogaron por cambiar la fecha en la que el juez emplazó a la jugadora a declarar, dado que la Ley Orgánica del Poder Judicial declara inhábil el periodo comprendido entre el 24 de diciembre y el 6 de enero, exceptuando las actuaciones judiciales urgentes.
Sin embargo, el magistrado ha rechazado la pretensión de los investigados en un auto, al que ha tenido acceso EFE este martes, en el que argumenta que Jenni Hermoso, que juega en el Pachuca de México, reside fuera de España y sólo puede desplazarse cuando el club “le da permiso, de conformidad con las obligaciones internacionales marcadas por la FIFA”.
También cuando la internacional está de vacaciones ante la “ausencia de partidos de la liga mexicana”, añade el juez, que recuerda que los abogados de Jenni Hermoso comunicaron al juzgado su disponibilidad para declarar el 2 de enero, “teniendo que regresar a México a continuación”.
El magistrado avanza que la investigación al expresidente de la RFEF por el beso en la boca que dio a la jugadora en la final del Mundial en Sídney (Australia) el pasado 20 de agosto está “prácticamente agotada” y que la declaración de Jenni Hermoso es “previsiblemente, la última”.
Por tanto, “siendo inviable la toma de declaración por comisión rogatoria con México, lo que supondría una demora de meses, cabe considerar la presente diligencia como urgente”, argumenta el juez para mantener la citación de la internacional.
Fue el abogado del director de la selección masculina, Albert Luque, quien formuló expresamente la petición de cambio de la comparecencia en un recurso al que se adhirieron el resto de investigados: Luis Rubiales, el exseleccionador femenino Jorge Vilda y el director de marketing de la RFEF, Rubén Rivera.
Además del período inhábil contemplado en la ley, la defensa también recordó otras normas como la Ley de Enjuiciamiento Civil o la de Enjuiciamiento Criminal, que adaptaba “medidas que permiten una mayor conciliación de la vida personal y familiar con el desempeño profesional de todos los profesionales”, incluidos los abogados.
Jenni Hermoso, cuya declaración es clave en el devenir de la causa, compareció ante la Fiscalía el 5 de septiembre y denunció que el beso en la boca que le dio su superior no fue consentido, y añadió que ella y su entorno se sintieron presionados por Rubiales y su equipo para que justificase la actuación de su superior públicamente.