LeBron James celebró su cumpleaños 40 con gratitud por la longevidad de su carrera y optimismo sobre su futuro con los Lakers de Los Ángeles.

Y cuando se le preguntó cómo sabrá cuándo sea finalmente el momento de retirarse, el máximo anotador en la historia de la NBA ofreció una evaluación franca de sus habilidades aún formidables.

“Para ser honesto, si realmente quisiera, probablemente podría jugar a un alto nivel durante unos… Es raro que diga esto, pero unos cinco o siete años más, si quisiera. Pero no voy a hacer eso”, dijo.

LeBron ya tiene una de las carreras más largas en la historia de la NBA, pero sabe que está acercándose a su fin.

Ha dicho repetidamente que no se quedará más de lo necesario; sin embargo, ese momento claramente no ha llegado: Sigue siendo una fuerza dominante para los Lakers, líderes de la División del Pacífico. Esta temporada promedia 23.5 puntos, nueve asistencias y 7.9 rebotes.

“Es algo risible, realmente, saber dónde estoy, ver dónde sigo estando, jugando a un alto nivel. Aún siendo un hombre joven, pero viejo en el esquema de cuántos años llevo en esta profesión”, indicó.

“Sólo pienso en cuando entré en la liga. Entré como un niño de 18 años y ahora estoy aquí sentado como un hombre de 40 años, un veterano de 22 años, con un joven de 20 años en la NBA también. Es bastante genial”, agregó.

James ya está en su campaña 22 en la NBA, más que cualquier jugador excepto Vince Carter, quien también jugó 22 temporadas, y el martes se unirá a la lista un poco más grande de jugadores de la NBA que han jugado después de cumplir 40 años cuando los Lakers reciban a los Cavaliers. El nativo de Akron, Ohio, ganó el único campeonato de Cleveland con los Cavs en 2016.

James dijo que reaccionó a su cumpleaños con una incredulidad familiar para una persona cuya vida ha avanzado a una vertiginosa velocidad sin darle tiempo de procesar todo.

“Tuve una década de los 30, así que despertar y simplemente decir, ‘Oh, vaya, oh, diablos, ¿Tienes 40?’”, dijo James con una sonrisa.

LeBron aceptó que ya sintió el avance del tiempo hace dos meses cuando él y su hijo, Bronny, se convirtieron en el primer padre e hijo en jugar juntos en la NBA.

James tampoco está pensando más allá de Los Ángeles, donde se ha establecido una vida cómoda en California con su familia desde 2018. Aún espera que los Lakers sean su última parada cuando decida cerrar su épica carrera.

“Me encantaría que terminara aquí. Ese sería el plan. Vine aquí para jugar la última etapa de mi carrera y terminarla aquí. Pero tampoco soy tonto ni demasiado desencantado para conocer el negocio del baloncesto. Pero creo que mi relación con esta organización habla por sí misma”, sentenció.

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