La temporada regular de la NFL comienza este fin de semana y algunos equipos están en plena transición de quarterback. Entre estas escuadras existen seis quarterbacks que aún no han mostrado lo que tienen por un periodo extendido de tiempo en la NFL. Ya sea porque son novatos, porque esperaron un año para desarrollarse o por lesión, estos seis quarterbacks llegan a la temporada 2023 con la presión mostrarse por primera vez en este nivel.
Tres novatos a relucir
Serán tres los quarterbacks seleccionados en el Draft del 2023 quienes buscarán sacar a los equipos que los seleccionaron del mal momento. Bryce Young, C.J. Stroud y Anthony Richardson fueron elegidos entre las primeras cuatro selecciones del reclutamiento.
Bryce Young (Carolina Panthers)
El primer jugador que escuchó su nombre en el reclutamiento fue el quarterback de Alabama. Young se caracteriza por ser rápido y atlético, pero su estatura y peso son menores a los de la mayoría de los quarterbacks en la NFL. Young ganó el Trofeo Heisman en 2021 y en su trayectoria colegial lanzó para 80 touchdowns por apenas 15 intercepciones.
Los Panthers, por su parte, buscan a su primer quarterback franquicia desde Cam Newton, pero por el momento cuenta con un plantel que tendría que mejorar mucho con relación a lo mostrado el año pasado si la ofensiva va a brillar.
C.J. Stroud (Houston Texans)
El estilo de juego de Stroud es opuesto al de Young. Stroud es más alto y pesado que la primera selección del Draft de la NFL, pero no tiene tanta movilidad. Stroud solo jugó dos años de futbol americano colegial, en Ohio State. Los Texans tampoco están en la mejor posición en cuanto a talento, pero tuvieron una buena cantidad de selecciones colegiales y algunas jóvenes promesas para ayudar al mariscal del campo.
Anthony Richardson (Indianapolis Colts)
El menos desarrollado de los tres novatos. Richardson apenas fue titular un año en la Universidad de Florida, pero es más grande, fuerte y atlético que los otros dos novatos. La esperanza en Indianapolis es que se convierta en un jugador similar a Jalen Hurts. Similar a sus compañeros de la clase del 2023, también llega a un equipo que no parece contar con las piezas para ser contendiente aún, pero buscará resolver al menos los problemas en los controles.
Por una segunda audición, Ridder y Howell
Dos quarterbacks que vieron acción limitada en la temporada 2022 de la NFL fueron Desmond Ridder y Sam Howell. a diferencia de Kenny Pickett, quien disputó 13 partidos en su temporada de novato el año pasado, Ridder y Howell apenas vieron un poco de acción.
Desmond Ridder (Atlanta Falcons)
Como novato, el producto de la Universidad de Cincinnati tuvo que esperar hasta la Semana 15 para abrir un partido como titular. Ridder tuvo marca de 2-2 y tuvo números modestos en comparación con los líderes de la NFL. Completó el 63 por ciento de sus envíos, con 2 touchdowns y sin intercepciones.
Los Falcons, a diferencia de los otros equipos en la lista, no exigirán tanto de Ridder en el juego aéreo, pues con Bijan Robinson, Tyler Allgeier y Cordarrelle Patterson, buscan establecer más su juego terrestre de acuerdo con el estilo de su entrenador en jefe, Arthur Smith.
Sam Howell (Washington Commanders)
Howell apenas vio acción en un partido el año pasado: una victoria en el último juego de la campaña ante los Dallas Cowboys. En esa ocasión, Howell conectó en menos del 60 por ciento de sus pases, con 169 yardas, un touchdown y una intercepción. Esta temporada entró sin competencia y Washington es una de las grandes incógnitas en la NFL, tanto por lo sucedido en el campo como por la venta del equipo por parte de Dan Snyder.
El aprendiz en Green Bay
Jordan Love (Green Bay Packers)
Tal y como sucedió con Aaron Rodgers mientras esperaba la salida de Brett Favre, Jordan Love tuvo que hacerse de paciencia detrás de Rodgers. Love apenas tiene marca de 3-7 como titular, con 606 yardas, 3 touchdowns y 3 intercepciones.
Que la mayor parte de su actividad llegara con algunos jugadores principales en la banca por cuestiones de descanso tampoco permite tener una mayor lectura sobre su capacidad, pero los Packers lo seleccionaron en el 2020 justamente con la esperanza de que se convirtiera en la cara de la franquicia tras la salida de Rodgers