Max Verstappen, piloto principal de Red Bull, lamentó que su escudería no pudiera arreglar los problemas con el RB20 que conducía junto al mexicano Sergio Pérez ni en la actual temporada con el RB21 que ya cobró el asiento del neozelandés Liam Lawson para cedérselo al japonés Yuki Tsunoda. En opinión del tetracampeón neerlandés, el equipo debe reaccionar de inmediato.
“Lo hecho, hecho está. Es más importante mirarnos a nosotros mismos y seguir trabajando para mejorar el coche. Ahora sí todos pueden decir ‘pobre Checo’, pero al final nos hemos metido en esta situación”, dijo Verstappen previo al Gran Premio de Japón.
“Las opiniones difieren al respecto. Personalmente creo que ser el equipo dominante y tener el coche más rápido es mucho más importante. Entonces tú mismo determinas el resultado en lugar de depender de cómo lo hacen los demás. Ahí es donde debería estar nuestro foco”, recalcó.
En torno a los cambios que se han dado como segundo piloto de Red Bull tras la salida de Lawson y la llegada de Tsunoda, Verstappen dijo que la escudería ya sabe su opinión y se negó a compartirla con los medios de comunicación, aunque aceptó que no ha tenido tiempo de conversar con el japonés debido a que se enfocó en las mejoras que necesita el RB21.
“Sólo vi a Yuki brevemente ayer (miércoles). Antes estaba muy ocupado en la fábrica, pero por lo demás tampoco depende de mí. Tiene que experimentarlo él mismo. Porque cómo experimento yo algo no es necesariamente cómo lo experimenta él”, sentenció el neerlandés.