Las labores de reparación y recuento de daños continúan en Acapulco, seis días después del impacto del huracán “Otis“, mientras empresas, aseguradoras y gobierno mexicano evalúan los factores necesarios para la recuperación económica de uno de los principales destinos turísticos del país que, en una primera estimación, podría alcanzar 15 mil millones de dólares.
Después de casi una semana del impacto, la firma de análisis de riesgo especializada en desastres naturales y guerras Enki Research ha estimado que la afectación alcanzaría los 15 mil millones de dólares y por lo menos 3 millones de mexicanos ubicados en las costas del estado de Guerrero, que en su mayoría dependen de la actividad turística y de servicios en el país, se han visto damnificados.
“En este caso, casi 3 millones de personas experimentaron vientos de fuerza de tormenta tropical, y es probable que el daño se acerque a 15 mil millones de dólares estadounidenses”, se lee en su más reciente reporte sobre este fenómeno.
Recuperación para Navidad
En este marco, el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió el martes “poner de pie” a Acapulco para navidad, luego de que “Otis” dejara hasta ahora 46 muertos, 58 desaparecidos y un número aún no cuantificado de los daños de forma oficial.
El secretario de Turismo, Miguel Torruco, dijo en una comparecencia con diputados del Congreso mexicano el lunes pasado que sería hasta la siguiente semana cuando se dé a conocer a cuánto ascenderá la reconstrucción de la infraestructura de Guerrero.
“En una semana estaremos ya en posición de decir más o menos cuánto saldrá la reconstrucción”, sostuvo e informó que se avanza de la mano del sector asegurador en México para acelerar el proceso de indemnización tras el golpe de “Otis” a los afectados.
Asimismo, el gobierno de México ha informado que mantiene reuniones diarias con el sector empresarial para evaluar, identificar y calcular los daños, requerimientos y necesidades de las zonas afectadas por “Otis”.
“Cabe resaltar que, en estos momentos, la prioridad sigue siendo salvaguardar la vida y la integridad física del pueblo de Acapulco y suministrar de manera constante y ordenada agua, alimentos y medicinas, principalmente”, señaló la Secretaría de Economía en un comunicado.
En este sentido, las autoridades mexicanas detallaron que se diseñan distintos mecanismos con recursos de los tres órdenes de gobierno y apoyos de la iniciativa privada mexicana.
Mientras se ejecutan planes de rehabilitación en el puerto de Acapulco de forma expedita para lograr la pronta recuperación de negocios y empleos.
Graves afectaciones
Según datos oficiales, el huracán “Otis” impactó al 98% de las viviendas y 80% de los hoteles en Acapulco, además de un 65% de la costa, equivalente a más de 4 mil 685 hectáreas y daños en 865 kilómetros de carreteras y en más de 2 mil 487 hectáreas tan sólo en Acapulco.
Por su parte, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (Amis) dio a conocer que en Acapulco existen 16 mil bienes asegurados, así como sus contenidos, además de 20 mil vehículos con una póliza vigente.
“’Otis’ estará muy probablemente en el listado de los 10 eventos más catastróficos en el sector”, comentó Norma Alicia Rosas, directora general de AMIS.
Riesgos sociales tras “Otis”
En tanto, la consultora Integralia también estimó posibles problemas sociales y políticos que podrían derivar en agravar la problemática, como por ejemplo, la mala respuesta del gobierno mexicano a la tragedia.
Además, previó un riesgo de irrupción social, toda vez que Acapulco, la ciudad más afectada por “Otis”, contribuye con el 80% de la actividad turística y seis de cada 10 mexicanos en esta zona vive en pobreza.
“Dadas las afectaciones a la infraestructura turística y pública, no se pueden descartar episodios de ‘conflictividad social’ mientras la región se recupera (los saqueos a comercios son una manifestación en este sentido)”, indicó en su reporte.
Además, Integralia consideró previsible que López Obrador y otros actores de poder, como los grupos criminales, busquen monopolizar la reconstrucción para obtener ventaja política.
“Si ello ocurre así, la capacidad de recuperación de Acapulco será lenta y limitada y empeorarán todavía más las precarias condiciones sociales de Guerrero”, refirió.
También estimó que una posible obstrucción de algunos actores de oposición podría mermar las labores de reconstrucción; aunque anticipó posibles efectos políticos a la base social del partido Morena, aunque no necesariamente sobre López Obrador, “cuya popularidad es sólida y casi siempre logra escabullirse del costo de las crisis”.