Con dos alertas opuestas: si se aprueba la reforma eléctrica podrían registrarse apagones en 50% de las conexiones del país; si no se aprueba y se mantiene el sistema actual, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) reducirá hasta 16% su participación en la generación nacional de energía, arrancaron los foros de discusión del tema con la participación de expertos en la Cámara de diputados este lunes.
Carlos De Maria, vicepresidente de la Academia Mexicana de Derecho Energético y abogado de empresas dedicadas a la energía en México, aseguró que si se cancela la generación e 62% de la energía (con la obligación constitucional de la CFE para generar 54% de la energía cuando hoy genera 38%), alrededor de 50%, es decir, unos 62 millones de usuarios, se quedarían sin luz, lo que provocaría un paro económico en la industria y el comercio, con su consecuente pérdida de empleos.
El abogado, explicó que en los 70, cuando se estatizó la industria eléctrica, México no tenía tratados internacionales con más de 130 países y no existía el problema del calentamiento global, por lo que en el contexto actual es impensable volver al modelo estatal porque no se satisfacen los requerimientos de capital y tecnología que necesita una industria de este tamaño.
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Así que, en 1992 se crearon esquemas complementarios para la participación privada, transfiriendo riesgos y obligando a que inviertan, a que se endeuden y traigan tecnología de punta las empresas que trabajan en México bajo la rectoría del Estado.
Entonces los dos esquemas con mayor penetración, que fueron el productor independiente de energía que apalanca sus financiamientos en el contrato que tiene con venderle a CFE y la opción entre privados que es el autoabastecimiento, en que las empresas generan para sí mismas bajo la regulación del estado.
“En 2013, bajo un esquema de colaboración entre el Estado y los sectores privado y social se busca modernizar y volver eficiente la generación de energía en el país”, aseveró, “hay muchas áreas por mejorar, migración de esquemas, revisión de costos, inversión en transmisión, pero mejorarlo no significa cancelarlo”.