Cientos de plantas de carne estadounidenses a las que se les otorgó acceso a China en un acuerdo comercial de “Fase 1” de 2020 con el presidente Donald Trump perderán la elegibilidad para exportar el domingo, lo que amenaza con aproximadamente 5,000 millones de dólares en comercio al mercado de carne más grande del mundo en medio de una renovada guerra comercial.

Perder el acceso a China supondría un nuevo golpe para los agricultores estadounidenses después de que Beijing impusiera a principios de este mes aranceles de represalia sobre aproximadamente 21,000 mdd en productos agrícolas estadounidenses, incluyendo un impuesto del 10% sobre las importaciones de cerdo, carne de res y productos lácteos de EU.

Beijing exige que los exportadores de alimentos se registren en la aduana para vender en China. Los registros de casi 1,000 plantas de carne de res, cerdo y aves de corral, incluidas algunas propiedad de Tyson Foods y Cargill, están programados para expirar el domingo, según registros del Departamento de Agricultura de EU (USDA, por sus siglas en inglés) y datos de la aduana china. Eso representa aproximadamente dos tercios de todos los registros existentes.

Las empresas se negaron a comentar o no respondieron a las preguntas de Reuters.

China no ha respondido a las repetidas solicitudes de las agencias estadounidenses para renovar los registros de las plantas, dijo el USDA en un informe la semana pasada, lo que potencialmente viola una obligación bajo el acuerdo de la Fase 1.

Los registros de unas 84 plantas expiraron en febrero y, aunque los envíos desde las plantas afectadas siguen pasando la aduana, la industria no sabe por cuánto tiempo China permitirá las importaciones.

“El riesgo de enviar productos con una fecha de vencimiento inminente es alto”, dijo Joe Schuele, portavoz de la Federación de Exportación de Carne de EU a Reuters.

“La situación es ciertamente grave si (los registros de) estas plantas no se renuevan. La situación tiene la atención de todos los exportadores”, agregó Schuele.

El USDA ha hecho de estas expiraciones una prioridad en las discusiones con Beijing, añadió.

El puerto de Shanghái también ha impuesto inspecciones y documentación más estrictas para las cargas de carne de EU, dijo la Federación a sus miembros en un boletín visto por Reuters, con algunos contenedores sujetos a una descarga e inspección completas, lo que aumenta el tiempo de procesamiento y las tarifas adicionales.

Para ser claros, no hay señales que sugieran que Beijing este imponiendo una prohibición total. Varias cientos de plantas han renovado sus registros hasta 2028 o 2029, según un alto diplomático con sede en Beijing.

EU fue el tercer mayor proveedor de carne de China el año pasado, después de Brasil y Argentina, representando 590,000 toneladas o el 9% del total de importaciones.

El USDA y la Oficina del Representante de Comercio de EU no respondieron a las preguntas de Reuters el jueves. El Ministerio de Comercio de China y el Departamento de Aduanas tampoco respondieron a las preguntas enviadas por fax.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China redirigió las preguntas a otras agencias sin nombrar ninguna.

El acuerdo comercial de “Fase 1”, firmado en 2020, puso fin a la primera guerra comercial entre EU y China con la promesa de Beijing de aumentar sus compras de bienes y servicios estadounidenses, incluyendo carne, por 200,000 millones en dos años. China no alcanzó la meta, que se acordó poco antes de que estallara la pandemia.

Ese año, 1,124 plantas procesadoras de carne de res, aves y cerdo, o instalaciones logísticas, estaban registradas en la aduana china para exportación, según el USDA, obteniendo acceso al mayor importador de carne del mundo. Hoy hay 1,842 instalaciones certificadas, pero quedará un poco menos de la mitad si expiran los registros de este domingo.

China está obligada bajo el acuerdo de la Fase 1 a revisar su lista de plantas aprobadas dentro de los 20 días posteriores a recibir las listas actualizadas del Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria del USDA, según el Instituto de la Carne, un grupo industrial de procesadores de carne de EU. No está claro si los retrasos actuales constituyen una violación del acuerdo.

El impacto potencial de las licencias vencidas podría ascender a 4,130 millones para la industria de la carne de res y 1,300 millones para el cerdo, según dijo la Federación de Exportación de Carne de EU en un boletín diario.

La pérdida de acceso a China sería un golpe especialmente duro para los exportadores de partes como patas de pollo y despojos de cerdo, que se consumen menos a nivel nacional.

Publicidad