Especialistas propusieron la creación de un régimen general de pensiones homogéneo y que sea coordinado eficazmente por diversas instituciones, al tiempo que simplifique la gestión de recursos y establezca reglas uniformes, en un contexto en el que el crecimiento del gasto en pensiones contributivas es mayor en promedio que el crecimiento económico.
El régimen general planteado se diferencia de la propuesta de la ley universal de pensiones presentada en el sexenio pasado, de acuerdo con lo planteado por la Agencia Francesa para el Desarrollo, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), la Iniciativa para la Transición Económica y Demográfica de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey y la Unión Europea en México.
Ese régimen debería ser concebido como una entidad encargada de gestionar bases de datos, afiliaciones y establecer las reglas fundamentales tanto para las contribuciones, como para los beneficios asociados.
Considerando la historia institucional, se plantea que el régimen general tenga su origen en el IMSS, que actuaría como la plataforma base sobre la cual deberían operar todos los sistemas federales.
Además, cualquier sistema estatal, municipal o privado que desee obtener beneficios fiscales debería integrarse y operar bajo la plataforma. La implementación de este régimen general conllevaría diversos beneficios, pues la actual falta de políticas equitativas se atribuye, en gran medida, al tamaño del sistema y sus diversos subsistemas entre las entidades gubernamentales.
Los especialistas aseguraron que las acciones de la Secretaría de Bienestar, la Ley del Seguro Social y las intervenciones de la Secretaría de Hacienda carecen de una coordinación efectiva, lo que genera desconexión y falta de claridad en cuanto a la efectividad de dichas políticas redistributivas.
Por ello, aseguraron, el establecimiento de un régimen general de pensiones daría un marco unificado que permitiría alinear y coordinar estas políticas de manera más eficaz, abordando las disparidades existentes y asegurando una mayor equidad en el acceso y distribución de los beneficios de pensiones.
Otras medidas planteadas por las instituciones se relacionan con mejorar el mercado laboral, incluyendo a aquellos sin seguridad social en esquemas de pensiones existentes y fomentando el ahorro voluntario, especialmente entre la población joven.
Además, resaltaron la importancia de garantizar que las mujeres tengan las mismas oportunidades laborales que los hombres, por lo que un sistema de pensiones equitativo tiene que estar anclado a la creación de un Sistema Nacional de Cuidados que les permita desarrollarse en el mercado laboral.
También propusieron el uso de las nuevas tecnologías para hacer que el sistema de pensiones sea más eficiente.