Una lectura de la confianza del consumidor destacó un aumento del pesimismo sobre la disponibilidad de empleo y las condiciones comerciales futuras en EU. Foto: AFP vía Getty Images

El pesimismo sobre la economía estadounidense se extendió entre más estadounidenses de lo esperado en septiembre, según los resultados de una encuesta publicada el martes por el grupo de expertos Conference Board.

Los últimos datos económicos muestran que los consumidores tienen mayores preocupaciones sobre un mercado laboral en declive y el aumento de precios en su país.

Datos clave

El índice de confianza del Conference Board —una medida de las percepciones de los consumidores sobre la economía— cayó a 94.2 en septiembre, desde 97.8 en agosto, situándose por debajo de la base de 100 puntos establecida en 1985. Esta cifra representa la lectura más baja desde abril y se ubicó por debajo de las estimaciones de Wall Street, que anticipaban 96, según FactSet.

De acuerdo con la encuesta, un mayor número de encuestados expresó menores expectativas respecto al mercado laboral: alrededor del 26.9% de los consumidores señaló que había una “abundancia” de empleos —el nivel más bajo desde febrero de 2021—, mientras que aproximadamente el 19% afirmó que los empleos eran “difíciles de conseguir”.

Las percepciones de los consumidores sobre su situación financiera actual también disminuyeron, registrando la mayor caída mensual desde que se comenzaron a recopilar estos datos, en julio de 2022, informó el Conference Board.

Los temores de una recesión se mantuvieron elevados, ya que un número creciente de consumidores considera que la economía estadounidense ya se encuentra en recesión. El índice de expectativas del Conference Board —que mide las perspectivas a corto plazo de los consumidores sobre el mercado— cayó a 73.4, permaneciendo por debajo del umbral de 80 puntos, considerado un indicador de recesión.

Tasa de contratación laboral

Las vacantes disponibles aumentaron más de lo previsto, alcanzando 7.23 millones, frente a la cifra revisada de 7.21 millones de julio, según informó la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) el martes. La tasa de contratación descendió al 3.2%, su nivel más bajo desde junio de 2024, mientras que el número de personas que renunciaron a sus empleos disminuyó en 75 mil.

A qué prestar atención

La BLS publicará el informe de empleo de septiembre este viernes. Los economistas prevén que la tasa de desempleo se mantenga estable en 4.3%, según FactSet.

Se espera que Estados Unidos haya creado 50 mil empleos no agrícolas durante el mes, frente a los 22 mil registrados en agosto. Sin embargo, no está claro si los datos se publicarán a tiempo, ya que el gobierno federal enfrenta un posible cierre administrativo inminente.

Antecedentes clave

La confianza en la economía estadounidense ha disminuido de forma constante en los últimos meses, mientras los ciudadanos expresan su preocupación por los efectos de los aranceles del presidente Donald Trump sobre los precios y por el debilitamiento del mercado laboral.

Datos separados publicados la semana pasada por la Universidad de Michigan mostraron que la confianza del consumidor cayó a su nivel más bajo desde mayo, debido a que los estadounidenses “continúan expresando frustración por la persistencia de los precios altos”.

Alrededor del 44% de los encuestados señaló que el aumento de la inflación y de los precios más elevados ha sido “erosivo para sus finanzas personales”, la lectura más alta en un año.

Los funcionarios de la Reserva Federal han indicado en las últimas semanas que el deterioro del mercado laboral es un factor clave detrás de los recortes previstos en las tasas de interés.

El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, sugirió que los riesgos “a corto plazo” de inflación se han moderado, mientras aumenta la preocupación por la salud del mercado laboral. Por su parte, la gobernadora Michelle Bowman expresó su inquietud de que el mercado pueda entrar en una “fase precaria”, advirtiendo que “un shock podría provocar un deterioro repentino y significativo”.

Este artículo fue publicado originalmente por Forbes US

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