El avance del peso frente al dólar sigue imparable, ya que este miércoles el tipo de cambio entre ambas monedas logró un nuevo récord al tocar las 17.0898 unidades por dólar, sin embargo, esto podría empezar a representar nuevos retos para la economía mexicana, sobre todo en las exportaciones y remesas.

El peso cerró la sesión con una apreciación de 0.66% u 11.4 centavos, cotizando alrededor de 17.11 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un máximo de 17.2466 y un mínimo de 17.0798 pesos por dólar, nivel no visto desde el 19 de abril del 2016, cuando el tipo de cambio tocó un mínimo es año de 17.05 pesos por dólar, según Banco Base.

De acuerdo con Grupo Financiero Monex, el nivel registrado este miércoles no se había visto desde hace más de 7 años, de hecho, la moneda mexicana acumula una apreciación de 12.1% en lo que va del año y se posiciona como la segunda divisa con mayores ganancias frente al dólar, solo por detrás del peso colombiano.

Por su parte, Vector expone que actualmente la referencia de apoyo se ubica en 17 pesos por dólar y de acuerdo con los indicadores técnicos que están en sobreventa extrema, lo probable es que respete ese nivel y que el siguiente movimiento fuerte sea de depreciación, o en el mejor de los casos de lateralidad.

“En el primer caso el repunte tendría como objetivo los 18.5 de inicio, en el segundo caso la fluctuación estaría entre 17 y 18 pesos por dólar. Ahora bien, aunque no se percibe como probable por el lado técnico, es un hecho que la tendencia que prevalece es de apreciación y no se puede descartar que continúe. Si rompe 17, el siguiente apoyo de largo plazo está en 16.30 pesos por dólar”.

No todo son buenas noticias pese al superpeso

Sin embargo, no todo son buenas noticias, Banco Base precisó que la fortaleza del peso mexicano que suma cinco meses consecutivos ganando terreno frente al dólar, está poniendo en jaque al sector exportador y empezando a causar ciertos estragos entre quienes envían remesas.

La institución financiera explica que la moneda mexicana no se había apreciado tanto en un periodo de 5 meses desde diciembre de 2020, cuando acumuló una apreciación de 10.60%. La última vez que el peso se apreció 5 meses al hilo fue de marzo a julio del 2021.

Base indica que las causas del superpeso se deben a que desde el año pasado el Banxico trazó un proceso de alza en su tasa de interés de referencia que la ubica  en 11.25%, una de las más altas en el mundo para países con grado de inversión, situación que ha privilegiado el efecto de carry trade frente a otras economías, tanto de países emergentes como entre los más desarrollados.

“En este escenario los exportadores y los receptores de remesas son los más perjudicados, al no poder  contrastar los efectos de esta apreciación a la misma velocidad, los niveles actuales del peso pueden causar una desaceleración del consumo y un menor crecimiento de las exportaciones mexicanas”, precisa.

De manera particular, detalla que para las empresas exportadoras factores como la pérdida de competitividad, la reducción de márgenes, una menor demanda de productos y el impacto hacia sectores dependientes de las exportaciones son efectos que empiezan a perjudicar su operación y sus presupuestos.

Asimismo, Banco Base considera que un peso mexicano fuerte puede hacer que los productos mexicanos sean más caros en los mercados internacionales, esto puede hacer que los exportadores enfrenten una mayor competencia de países con monedas más débiles y resulte en una pérdida de competitividad.

“Si los exportadores no pueden aumentar los precios de sus productos en línea con la apreciación del peso, sus márgenes de beneficio podrían reducirse perjudicando la rentabilidad de sus operaciones y limitando su capacidad para invertir en el crecimiento y la expansión de su negocio”, explica.

En el caso de las remesas, si el tipo de cambio continúa el resto del año en los niveles actuales, estas perderán 10.60% de su poder adquisitivo respecto a 2022, siendo la mayor caída de la cual se tenga registro, ya que los mexicanos en Estados Unidos están mandando el mismo número de dólares y sus familiares reciben menos pesos.

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