El presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, dijo el miércoles que la inflación sigue en cotas problemáticas y que el banco central estadounidense tomará medidas para reducirla.
“La inflación sigue siendo demasiado alta, y utilizaremos nuestras herramientas de política monetaria para restaurar la estabilidad de precios”, dijo Williams en un discurso pronunciado en una reunión en la Universidad de Nueva York.
Williams, que también ocupa el cargo de vicepresidente del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), encargado de fijar las tasas de interés, no comentó su opinión personal sobre lo que está por venir en materia de política monetaria.
Sí señaló que las previsiones de los bancos centrales publicadas recientemente apuntaban a un mayor endurecimiento monetario para ayudar a reducir la inflación, y no rebatió la opinión de lo que los mercados esperan que haga la Reserva Federal con las tasas.
La Reserva Federal ha aumentado sus tasas de corto plazo de forma muy agresiva durante el último año y, en su reunión de finales de marzo, incrementó su tipo objetivo 25 puntos básicos, hasta situarlo entre el 4,75% y el 5%. Se espera que en su reunión de principios de mayo aumente otro cuarto de punto porcentual y mantenga los tipos el resto del año.
En sus comentarios, Williams dijo que la tensión en el sector bancario que comenzó el mes pasado y que ha dado lugar a amplios préstamos de emergencia de la Reserva Federal a los bancos parece estar enfriándose.
“Las condiciones del sector bancario se han estabilizado, y el sistema bancario es sólido y resistente”, dijo Williams. Sin embargo, añadió que los problemas probablemente encarecerán el crédito y dificultarán su obtención, lo que a su vez deprimirá el crecimiento.
“Todavía es demasiado pronto para calibrar la magnitud y duración de estos efectos, y seguiré de cerca la evolución de las condiciones crediticias y sus posibles efectos sobre la economía”, dijo Williams.
El banquero central señaló en su discurso que, aunque la inflación es alta, se ha ido enfriando. Frente al actual aumento del 5%, medido por el índice de gastos de consumo personal de febrero, considera que la inflación disminuirá al 3,25% este año y volverá a alcanzar el objetivo del 2% en los próximos dos años.
Williams señaló asimismo que el mercado laboral, “muy ajustado”, también está experimentando cierto enfriamiento.
Williams no espera una recesión, en contraste con la opinión del personal del banco central, revelada en las minutas de la reunión de marzo del FOMC.
