La llegada de la doctora Claudia Sheinbaum a la presidencia de México, acompañada en los niveles importantes por las mujeres que ganaron un buen número de gubernaturas en las pasadas elecciones, y también por las altas funcionarias que se han ido designando para ocupar relevantes cargos en la administración federal y en los gobiernos estatales, constituye un sólido avance en el posicionamiento y empoderamiento de las mujeres en nuestro país. Sin duda son avances y luces para la sociedad moderna. 

Pero haciendo a un lado la euforia morenista por el ya reconocido triunfo guinda, en la ciudad de Puebla, la semana anterior llamó la atención un inusual hecho de carácter político, que muestra la insensibilidad de algunos hombres del poder de ese estado, respecto a un crimen ocurrido en esa ciudad en contra de una reconocida abogada, en un sonado caso de feminicidio que escandalizó a los medios de comunicación de esa ciudad y de la capital del país hace dos años. 

Por ese delito se encuentra en la cárcel el licenciado Javier López Zavala, un exfuncionario priista que había ocupado altos cargos y con fuerte vinculación con Alejandro Armenta, el gobernador electo de esa entidad.  

En una decisión absurda por ser un despropósito, y por fortuna, un acto no acostumbrado en las altas esferas de la vida pública nacional, a algún poblano se le ocurrió crear una Sala de Secretarios de Gobierno, para colocar las fotografías de los exfuncionarios que tuvieron ese cargo en los sexenios previos, colocando por supuesto  la del mencionado recluso López Zavala. El evento de inauguración fue encabezado por el gobernador actual y por el propiuo Alejandro Armenta.

López Zavala fue detenido luego del crimen ocurrido el 22 de mayo de 2022 y sigue su proceso en la cárcel, por la muerte de su esposa Cecilia Monzón, una prominente abogada en la lucha feminista. En ese caso fueron vinculados un sobrino y el secretario particular del político preso, y se continúa en la etapa de presentación de pruebas. 

Pero por la ahora célebre Sala de exsecretarios de gobierno, la familia de la difunta esposa, se ha indignado y la población también, como han señalado varios medios de comunicación, debido a la fuerte inconformidad e indignación de Helena Monzón, hermana de la profesional asesinada.

Este asunto y su desenlace debieran ser observados con mucho detenimiento por la presidenta Sheinbaum, para que las autoridades, los políticos y los altos dirigentes  partidistas del nuevo régimen, se abstengan de enviar señales  equivocadas y muy preocupantes a la población. México vive tiempos difíciles en lo relativo a la seguridad, a la estabilidad social, a la impunidad y a las condiciones de peligro y falta de justicia para las mujeres. 

Los datos oficiales indican que en Zacatecas, Morelos y Tamaulipas ocurren la mayor cantidad de desapariciones de mujeres, y que de cada 10 desapariciones de personas, 7 son hombres y 3 son mujeres. Por su parte, la Oficina de la ONU México, informa que se comete un promedio de 10 asesinatos de mujeres en el país.

El caso de Puebla no es el caso de Veracruz, debe reconocerse. La gobernadora electa Rocío Nahle cuida personalmente la integración de su gabinete y la elaboración de su programa de gobierno. Ha designado en posiciones clave a Xóchitl Molina, Claudia Tello, Luz Mariela Zaleta, Margarita Santopietro, Guadalupe Osorno, Adriana Muñoz, Irma Dávila y Dulce María de la Reguera, pero en las semanas venideras puede incorporar a otras damas en los puestos pendientes de definir.  

Y en el municipio de Xalapa, el alcalde Ricardo Ahued—próximo secretario de gobierno con la ingeniera Nahle— acaba de hacer un merecido homenaje a la señora Mónica Mayer, una destacada precursora del arte feminista en América Latina y ganadora de la Medalla Bellas Artes en 2021. Al otorgarle a esta artista el reconocimiento de Visitante Distinguida, le expresó con admiración que “la ciudad de Xalapa es la casa de las feministas de México”.

La nación entera necesita que en relación a la justicia para las mujeres, y en todas las acciones del gobierno federal, estatal y municipal en las diferentes áreas de la vida pública, existan más luces que sombras y que el país avance en la disminución de  la impunidad y los retrocesos que las lastiman, indignan y desalientan en su cabal desarrollo como seres humanos.    

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