Como se ha comprobado, el tema nacional más importante es de tipo económico y tiene que ver con el bienestar de las familias de este país. Así lo ve el próximo presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, aunque en estos días se le atraviesen algunos distractores como son el paso de los migrantes centroamericanos y la consulta ciudadana por el aeropuerto de la Ciudad de México.
Hace unos días en la ciudad de Monterrey, comunicó que su intención es lograr la tasa cero en desempleo. Que los proyectos de siembra de un millón de árboles frutales y maderables y el del Tren Maya, tienen como objetivo crear 400 mil empleos en el sureste de la república. En compañía del gobernador de Nuevo León -el famoso Bronco-, afirmó que “vamos a crear cortinas para ir reteniendo a los mexicanos y centroamericanos en sus pueblos”, para lo cual anunció que ha hablado con Donald Trump sobre una inversión conjunta de treinta mil millones de dólares para ese fin.
Y para complementar las noticias sobre desempleo, el día de ayer el periódico El Economista difundió los resultados de la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del INEGI, resaltando que el desempleo creció en los dos sexenios recientes y que de cada 100 personas que buscan empleo, cuatro no lo consiguen. En estos momentos existen 1.86 millones de mexicanos desempleados.
De acuerdo con esa encuesta, la tasa de desocupación aumentó en 20 entidades federativas, siendo Tabasco, Baja California Sur y Nayarit las más perjudicadas. Afirma el INEGI que 3.60 por ciento de la población económicamente activa está en situación de desempleo.
El medio informativo especializado en economía y negocios, indicó que en la época de Felipe Calderón esa tasa era de tres desocupados por cada cien.
Pero el problema se acentúa cuando se utilizan cifras absolutas para explicar esa investigación. EDOMEX tiene 324,554 desempleados, Ciudad de México 231,848, Jalisco 114,365 y en cuarto lugar Veracruz con 107, 254 desempleados.
En números gruesos, esto quiere decir que aproximadamente 428 mil veracruzanos (más del cinco por ciento de la población estatal) tienen severos problemas para sobrevivir sin ayuda de familiares o apoyos gubernamentales.
El gobernador electo Cuitláhuac García Jiménez y sus colaboradores de la parte económica y del trabajo, tendrán que esforzarse en brindar resultados con carácter de urgente. Tendrán que sumarse a los trabajos que la federación realice para echar a andar los proyectos de refinerías, de comunicaciones y traslados de mercaderías a través del Istmo de Tehuantepec y fundamentalmente los de reforestación masiva en el sur de Veracruz.
Ojalá que los temas de migrantes y del aeropuerto no modifiquen las intenciones que Andrés Manuel ha desvelado para el sureste de México.
