Jesús Lezama

Como por arte de magia, después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador visita Veracruz las autoridades estatales aseguran que ‘todo marcha sobre ruedas’, hasta dicen: ‘vamos bien y viene lo mejor’. La honestidad y los ideales son intangibles por más que se quieran resaltar en discursos huecos, cansinos. Es más, los aplausos unánimes lo único que consiguen es despertar más dudas.

El gobierno y la sociedad tienen percepciones distintas. La clase cuitlahuista se auto engaña, no son auto críticos, olvidan que ya no son oposición, son gobierno. La sociedad habla sobre la inseguridad, la crisis económica, los subejercicios estatales, el desabasto de medicamentos, la ausencia de obra, la falta de pericia para gobernar, por mencionar algunos temas.

Mientras se siga distrayendo a la sociedad con debates inocuos y no con discusiones que reconozcan los errores, jamás se propondrán soluciones a los problemas que padecen los veracruzanos. Así, Veracruz seguirá caminando mal.

Anuncios

Bien dijo el maestrín: ‘La política es más de percepciones que de realidades’.

Publicidad