Por Yolis de Limón
En esta ocasión en el programa “Lo que hay”, que se transmite en vivo todos los jueves de las 18 a las 19 horas en 93.7 FM, de Magia en Avanradio, conducido por Toño Flores, Luis Siguenza y una servidora, conversó con la doctora Patricia Ponce Jiménez, Investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS-Golfo) y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
Rememorando siete años de la entrevista realizada por el portal de noticias Palabras Claras, en la que se tocó la grave situación en la que se encontraba el estado de Veracruz con respecto al VIH SIDA, ahora la doctora Ponce nos da un contexto actual acerca de cómo ha evolucionado el tema, desde el ámbito médico hasta el esquema social, además de exponernos su opinión sobre el desinterés del gobierno estatal que ella observa.
A siete años de aquella entrevista, dónde se comentaba que a nivel nacional Veracruz era el estado con la cifra más alta de mujeres contagiadas con el virus de inmunodeficiencia adquirida, ¿cuál es el panorama actual?
La diferencia es que lo único que hay son nuevos focos rojos, y les voy a dar seis cifras que son oficiales, que nos pueden dar un panorama sobre cuál es la situación del VIH actualmente en 2025 en el estado de Veracruz. Tenemos el segundo lugar en casos de sida, primer lugar a nivel nacional de nuevos casos de VIH, somos el estado que más mujeres aportamos al contexto nacional de mujeres con VIH y sida, el primer lugar en mortalidad de mujeres a causa del sida, el primer lugar en mortalidad de embarazadas con VIH y el mayor número de nacimientos de niños y niñas con el virus, ese es el panorama actual del estado de Veracruz.
¿Cómo se relacionan estas cifras con la percepción de la sociedad hacia las mujeres, considerando que es un sector de la población vulnerable ante esta enfermedad?
Hay que aclarar que cuando decimos que existen mujeres portadoras de VIH, el pensamiento popular es que son trabajadoras sexuales. Pero eso no ocurre así, en el estado de Veracruz las trabajadoras sexuales afectadas representan el 1%, mientras que las amas de casa representan el 14%, es decir, es mayor el porcentaje de mujeres casadas dedicadas al hogar, que son portadoras de esta enfermedad, que trabajadoras sexuales.
Además el 90% de estas mujeres que adquieren el VIH, lo hacen a través de su pareja estable, llámese marido o novio.
¿Esto responde a una violencia estructural familiar?
Es una cuestión fisiológica, cultural y social; las mujeres por la disposición de los órganos sexuales estamos más propensas que un hombre, a adquirir VIH. Esto se debe a que nuestros órganos sexuales son internos; al haber un coito, la penetración provoca que el semen entre directamente. También puede ser debido a un desgarramiento o por mantener relaciones sexuales al momento de la menstruación, por ello las posibilidades de contagio aumentan.
Socialmente y culturalmente, siguen existiendo mujeres con menos acceso a la educación, servicios de salud y sin acceso a una vida sexual libre, responsable y placentera. Todo esto provoca que seamos más vulnerables, por la violencia que sufren algunas mujeres, también un factor muy importante, es que tenemos un desconocimiento sobre nuestro cuerpo y nuestra sexualidad.
¿Qué tanto hay de culpabilidad entre el gobierno y la sociedad?
Generalmente lo que hace el estado, se llame de Veracruz o no, es responsabilizar, es decir, “las personas tienen VIH porque son promiscuas”, “porque son anormales o tienen una sexualidad irresponsable”, “porque los jóvenes no se cuidan”; entonces responsabilizan a la sociedad. Creo que es un discurso muy amañado, porque hay 4 elementos que me hacen pensar en la falta de compromiso y responsabilidad del estado, del gobierno veracruzano, la Secretaría de Salud y del Congreso del estado de Veracruz con respecto a esta problemática.
Uno de ellos es que no hay una educación sexual integral acorde con las necesidades de una epidemia como la que tenemos enfrente. Lo segundo es que existe esta “no educación sexual”. Entonces, en la sociedad veracruzana continuamos siendo profundamente conservadores; en la mesa se habla de la sexualidad del vecino, de la comadre, hasta del gobernador o gobernadora, pero no se habla de sexualidad con los hijos. El tercer elemento, es que por parte del gobierno, no hay ni una sola campaña que hable de la necesidad de la prevención y de la detección oportuna de este virus.
Por último, el congreso del estado no destina hace muchos años recursos suficientes etiquetados para que el programa estatal de la Secretaría de Salud los pueda implementar. Lo central es que el VIH no está en la mesa de los problemas sociales de este siglo en Veracruz.
¿Consideras que hay una epidemia de VIH en Veracruz?
Por supuesto, ya que es un problema de salud pública muy grave, desde mi punto de vista, totalmente fuera de control. Les pongo un ejemplo, el año pasado en el estado de Veracruz hubo entre 1500 y 1800 nuevas personas que adquirieron el virus, por lo que es una epidemia sin control.
¿Estás personas nuevas son posibles agentes de contagio para otras personas?
Este es un tema importante de aclarar; una persona que tiene VIH y se detecta a tiempo, entra a un esquema de medicamentos; lo que el medicamento hace es bajar la carga viral, es decir la cantidad del virus en su sangre, se reduce, hasta ser indetectable, de tal forma que, si esta se hace una prueba de VIH, el virus no aparece aunque lo porte. En ese estado de indetectabilidad, puede mantener relaciones sexuales con una persona sin condón y no transmitirlo. El problema está en cualquier persona que ejerza su vida sexual sin protección.
Tomando en cuenta la cantidad de información que nos rodea hoy en día, ¿Qué tanto ha incrementado el índice de discriminación hacia las personas portadoras de VIH?
Yo creo que la ciencia médica tiene ganada la partida a la perspectiva social, porque a la vuelta de 30 años, hoy una persona viviendo con VIH no debería morir, bueno, en el estado de Veracruz se siguen muriendo, pero si una persona toma sus medicamentos correctamente, puede vivir como una persona normal y puede sexuar sin condón e incluso tener hijos que nazcan sin el padecimiento; lo que pasa es que aquí no hay una atención integral para las mujeres embarazadas, pues detectan que tienen VIH cuando están a punto de parir.
El virus es detectable en el tercer mes de embarazo, se receta un medicamento y ese niño o niña va a nacer sin la enfermedad, mientras la mamá no amamante.
En ese sentido la ciencia ha avanzado, antes, al inicio de la epidemia tenías que tomar 40 pastillas, hoy con una pastilla la persona vive y tiene calidad de vida, ¿dónde es que estamos atascados?, precisamente en el tema social, por eso decimos: El VIH no mata, la discriminación sí. Porque hoy 2025, se siguen expulsando a los niños de las escuelas, cuando se enteran no de que el niño tiene VIH, sino que su padre o madre tienen el virus. Muchos lugares siguen exigiendo la prueba de VIH o si detectan que lo tienes te despiden y en las universidades se siguen discriminando a las personas portadoras del VIH.
A las mujeres embarazadas portadoras se les discrimina, les imponen el silencio; esto hace que si yo tengo VIH, para qué me hago una prueba o me trato, si voy a ser discriminada, expulsada o no me van a permitir entrar a la universidad. Por eso es que el VIH sigue siendo una enfermedad de transmisión sexual sumamente estigmatizada y discriminante.
Esto porque es sexual, si tengo cáncer me van a compadecer “pobrecita”; sin embargo, si adquiero VIH, lo que está en el centro del debate es mi moralidad, el ejercicio de mi sexualidad. “¿Con quién te acostabas?” “Se acostaba con muchos” “Era promiscua” “Andaba con trabajadoras sexuales”, dirán, entonces, lo que se juzga es la moralidad y de ahí viene esta discriminación tan fuerte que sigue matando a muchas personas.
En el Grupo Multisectorial en VIH-SIDA e ITS del Estado de Veracruz, ¿Se ha tenido en estos primeros 100 días de gobierno algún acercamiento con las autoridades de salud? ¿Ha existido algún tipo de comunicación?
Seguimos con la mano extendida, nosotros tuvimos un trabajo durante 20 años, sobrevivimos a seis secretarios de salud, el último fue el Dr. Iván, que llegó con el entonces gobernador Yunes Linares, ahí fue que rompieron relación con nosotras y desde entonces, no ha habido una aceptación por parte de la Secretaría de Salud, es decir, la de Yunes y ahora vino la de Cuitláhuac, que fue peor.
Con Yunes nos pudimos sentar en la mesa de la negociación para lograr recursos para el programa, nosotros trabajamos de forma voluntaria, en cambio, con Cuitláhuac nunca pudimos tener relación con ninguno de sus tres secretarios; y ahora lo que continuamos diciendo es que seguimos con la mano extendida.
Lo que nosotros hemos venido sosteniendo durante muchos años es que si alguien sabe de la problemática de la situación de la epidemia del estado de Veracruz, somos nosotras y nosotros, porque nos hemos dedicado a investigarla, estamos cerca de la gente, tenemos relación con las personas, escuchamos sus quejas y no cobramos absolutamente nada, es un trabajo voluntario, no recibimos financiación de nadie. Nosotros nos auto financiamos, tenemos un diagnóstico hecho de la situación y sabemos dónde hay que tomar medidas estratégicas para impactar y dejar de tener este crecimiento.
Y pueden buscarnos en el Multisectorial. Nosotros damos Asesoría y Defensoría de Derechos Humanos y pueden localizarnos en el teléfono 2281 611431.