Más de 30 mil personas están en riesgo ante una contingencia en la planta nuclear de Laguna Verde, pues las rutas de evacuación están completamente destruidas, reprochó el diputado local Ernesto Cuevas Hernández.
A la par, acusó que en Veracruz se cuenta con “la carretera de la muerte” en alusión a la carretera costera 180, que va de Cardel a Poza Rica, que semana a semana debido a sus malas condiciones provoca decenas de accidentes, donde varias personas pierden la vida.
Ante esto, exigió a la delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes efectuar una reparación integral de esta vía, así como de las rutas de evacuación que se encuentran en el perímetro de 16 kilómetros alrededor de la planta nuclear de Laguna Verde.
Dijo que son alrededor de 30 mil personas que se encuentran en dicho perímetro que abarca los municipios de Úrsulo Galván, Actoapn, Alto Lucero y Vega de Alatorre.
Señaló que ante una contingencia en la central nucleoeléctrica, los pobladores corren más riesgo por transitar en las rutas de escape y en la carretera federal, que por una posible fuga en la instalación de Comisión Federal de Electricidad.
Comentó que ahora, que está en proceso de construcción la autopista Cardel-Poza Rica, existe mucho temor por los pobladores de la zona, de que ya no se le dé ningún tipo de mantenimiento a la carretera costera.
“Esa carretera está completamente destruida, es un riesgo, ya no tienen hoyos, tienen cráteres hasta donde podríamos echar unas mojarras a nadar”, añadió.
Ernesto Cuevas Hernández comentó que en pláticas que ha sostenido con pobladores de los municipios de Úrsulo Galván, Actopan, Alto Lucero, Vega de Alatorre y Nautla le han platicado que prácticamente todos los días hay algún accidente.
De igual forma, en el caso de las rutas de evacuación, señaló que varias de ellas están en condiciones deplorables y que ante una emergencia en la central nuclear, no permitirían un rápido desalojo de las comunidades cercanas.
