Xalapa, Ver.– Mientras el gobierno de Rocío Nahle repite el discurso del “amor” y la “transformación” para Veracruz, esta tarde la realidad se impuso con escudos y toletes: granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública reprimieron a un grupo de ex trabajadores del extinto Seguro Popular que se manifestaba pacíficamente frente al Palacio de Gobierno para exigir el pago de sus indemnizaciones.
Los inconformes, despedidos desde la desaparición del programa federal, acusan que el Gobierno del Estado ha retrasado por años el cumplimiento de sus derechos laborales. Ante la falta de respuesta institucional, instalaron una protesta pacífica en la calle principal del Palacio de gobierno, donde permanecían con pancartas y documentos que acreditan su situación.
Minutos después, elementos antimotines avanzaron en formación para desalojarlos. Testigos reportaron empujones y el intento de arrebatar celulares a quienes grababan la intervención. “Así responde el gobierno del amor”, reclamó uno de los manifestantes mientras era retirado por la fuerza.
La represión ocurrió en el mismo día en que la administración estatal insistió en que Veracruz vive una etapa de apertura y diálogo. Sin embargo, el operativo contra los ex trabajadores reveló un contraste evidente entre el discurso oficial y la forma en que el gobierno atiende las demandas ciudadanas.
Los manifestantes advirtieron que no desistirán hasta recibir lo que les corresponde por ley.




