El ex gobernador Javier Duarte de Ochoa señaló que él decidió aceptar, porque fue obligado, una sentencia de culpable del delito de asociación delictuosa, a través de un juicio de procedimiento abreviado, porque tenían a su familia como rehén.
Esto lo mencionó, a través de sus redes sociales, luego de que en el libro “No es normal”, escrito por la periodista Viridiana Ríos fuera mencionado, como autor de la creación de empresas fantasma y desvío de recursos.
Ante ello, el ex mandatario estatal precisó “antes que nada permíteme comentarte que soy un seguidor tuyo por ser una periodista brillante, quien ha sabido abrirse paso en la vida a través de su propio esfuerzo, en eso me identifica contigo, a nosotros nadie nos heredó nada, todo lo que hemos logrado es gracias a nuestra propia capacidad y tenacidad”
Y agregó “En tu muy interesante libro No es normal me dedicas unas líneas en la página 195, al respecto quisiera hacerte una respetuosa aclaración”.
En ese sentido, Duarte de Ochoa aclaró, según él, que nunca participó en un desvío de recursos públicos el cual la autoridad nunca pudo comprobar, tan es así que la sentencia que aceptó a través de un procedimiento abreviado, el cual le obligaron hacer, ya que tenían a su familia como rehén, no contempla reparación del daño alguno, sólo se limita al pago de una multa de 56 mil pesos.
“En relación a la creación de empresas fachada, no existe un sólo documento que me ligue a una sola de éstas, salvo las declaraciones de personas a quienes ni conozco, que nunca trabajaron conmigo o fueron funcionarios públicos en mi gobierno, a los que la autoridad ministerial les dio sendos criterios de oportunidad con el único requisito que declararan en mi contra”, añadió.
Desde su opinión, Javier Duarte aseguró no existe una sola transferencia bancaria, pago de un sólo peso, o propiedad alguna en la que su familia o él se hayan visto beneficiados.
Y remató “todo fue un circo mediático armado por mi enemigo político (Yunes) y su acuerdo con el anterior régimen federal (Osorio Chong)”.
