Desde hace varios días la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle se ha reunido con las diferentes cámaras de la construcción en el norte, el sur y en el centro de la entidad para exponer los proyectos constructivos que emprenderá su administración.
En todas esas zonas, los empresarios de la construcción comentan que han quedado satisfechos con ese tipo de encuentros. Primero, porque Rocío Nahle les ha ido a hablar de frente y, segundo, porque les ha enfatizado y exigido que si sus funcionarios piden “moches” que denuncien y se lo hagan saber directamente a ella. Al menos en la palabra y la intención suena bien, comentaron algunos de los asistentes.
En la última asamblea, desarrollada el jueves pasado en el Word Trade Center de Boca del Río, se congregaron cientos de agremiados a la delegación de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) de Veracruz y Xalapa.
En esa concentración, después de exponer las obras que se realizarán en esas zonas, el puente de Boca del Río y el acueducto para Xalapa, lo que más llamó la atención de los asistentes es el respaldo abierto que mostró la gobernadora Rocío Nahle a su secretario de gobierno Ricardo Ahued.
“A Ricardo le tengo toda la confianza, además es un hombre honesto”, dijo, claro y fuerte, Nahle a los emprendedores. Y esto último no sólo lo hizo la ejecutiva estatal con este gremio, también lo ha comentado en corto con sus cercanos colaboradores, entre ellos el Almirante Alfonso Reyes, el secretario de seguridad pública en Veracruz.
Sin embargo, se comenta insistentemente que hay alguien que despacha en una esquina del Palacio de Gobierno en Xalapa junto con un legislador morenista, que, obstinados contra Ricardo Ahued y con su puesto, han aceitado a algunos propagandistas para denostar al exalcalde de Xalapa.
